OnePlus 8: el móvil chino con 5G que presume de ser el 'iPhone de los Android'

La industria de la tecnología fue una de las primeras en notar los efectos de la Covid-19 con la cancelación del Mobile World Congress de Barcelona a mitad del mes de febrero. Mes y medio más tarde, pese a la caída mundial en la venta de móviles, según apuntan varias consultoras especializadas, las cifras han disminuido en tasas que oscilan desde el 14%, en el mejor de los casos, hasta el 38%, el sector puede ser uno de los primeros en recuperarse una vez se ha recuperado la normalidad en China, según han ido relajando las restricciones en el país.

Las presentaciones han vuelto, aunque sea de forma virtual. OnePlus no tiene el músculo publicitario de la competencia, pero la compañía china cuenta con un excelente boca a boca entre usuarios y amantes de la tecnología que han atraído hasta la compañía china a compradores de smartphones iPhone, Samsung o Huawei por su relación calidad precio. Actualmente la empresa opera en 38 regiones del mundo y presume de ventas (sin decir números) del OnePlus 7. «La respuesta ha sido muy buena», apuntó hace unos meses el responsable de OnePlus en España, David Sanmartín. Según los últimos datos disponibles, desde 2017 a 2018, las ventas de smarphones de la marca china aumentaron en un 45% a nivel mundial.

Gran parte del éxito de la compañía radica en la forma de concebir sus teléfonos. Desde las oficinas de la empresa en España explican que su crecimiento responde a dos claves como con son la comunidad y el enfoque del producto. La asiática aprovecha los foros para mantener una conversación fluida con los usuarios -cifra su comunidad en más de 5 millones de miembros activos- y conocer cuáles son las necesidades, los puntos a mejorar y en qué deben fijarse para diseñar los nuevos modelos.

«Nuestro objetivo nunca ha sido ser buenos haciendo teléfonos baratos, simplemente queríamos hacer el mejor teléfono posible». Son declaraciones de Carl Pei, cofundador de OnePlus, durante una entrevista reciente.

Entre las especificaciones de los nuevos terminales, la pantalla curva del OnePlus 8 (6.55 pulgadas) y 8 Pro (6.78 pulgada) será AMOLED y su tasa de refresco tendrá de 90 Hz y 120 Hz, respectivamente (la cifra más rápida que vemos ahora mismo en los móviles como es el caso de este 'iPhone de los Android' podría alcanzar un máximo de 1.300 nits de brillo, por lo que jugaría en la misma competición que los del logo de la manzana mordida y el gigante surcoreano).

Cuentan con un procesador Qualcomm Snapdragon 865, lo que significa siempre apostar a caballo ganador en cuanto a rendimiento; configuraciones de RAM y almacenamiento interno de hasta 12 GB y 256 GB, respectivamente. En cuanto a las cámaras la principal novedad es que la compañía ha optado por el eliminar el formato pop-up extraíble de la parte frontal con la que probó en el modelo anterior; ahora pasa a integrarse en un orificio en la esquina superior izquierda. El OnePlus 8 Pro tiene una cámara principal de 48MP Sony IMX586, una cámara gran angular de 48MP, una cámara teleobjetivo de 8MP y una cámara de profundidad de 5MP. En la parte delantera, cuenta con una cámara de 16MP. Por otro lado, el OnePlus 8 cuenta con una triple cámara trasera (48 MP + 16 MP + 2 MP para el macro) y 16MP en la frontal.

El OnePlus 8 Pro tiene tecnología Warp Charge 30 Wireless. Con una buena batería de 4,500 mAh se puede cargar del 0 a 50% en unos 20 minutos, incluso cuando la carga se realiza durante un uso intenso del terminal, como puede ser con un videojuego. De este modo, el móvil mantiene el ritmo de carga rápida sin apenas generar calor. En esta ocasión la compañía se suma a la carga inalámbrica a 30W que es capaz de cargar el 50% de la batería de un móvil en 30 minutos iniciando desde cero.

El nuevo buque insignia de la empresa china tendrá un precio que oscilará entre los 709 euros y los 1009 para la versión más potente del terminal, lejos ya de los 300 que costaba hace un lustro el primer OnePlus y con los que presumían de ser un 'flagship killer'. Los tiempos y las ambiciones han cambiado para todos.