UCCL define como «éxito» la movilización en la que unos 300 tractores se han quedado fuera de Madrid

«Ya nos obligan a salir», comenta el agricultor arandino Francisco Barona, «poco a poco vamos a ir abandonando Madrid porque ahora ya no hay autorización». En su caso ha conseguido llegar hasta las puertas del Ministerio de Agricultura, «otra gente no ha podido entrar, ni si quiera salir de los parking donde han hecho noche».

La primera de las columnas de tractores procedentes de Castilla y León llegaba desde Burgos y en este caso, hicieron noche en Robregordo; y la segunda en El Espinar, con tractoristas de Valladolid, Ávila o parte de la provincia de Segovia. «La gente que se ha visto en Desguaces La Torre era la que procedía de Toledo», aclara, y la que posteriormente ha cortado la A 42, ante la imposibilidad de avanzar con sus tractores.

Francisco ha sido testigo del forcejo con la policía, «a mí me han roto el móvil, no nos dejaban pasar hacia el Ministerio y la gente ha roto el cordón policial por lo que ha habido golpes».

Su sensación es que la movilización ha sido «algo increíble, único» dado que «había mucha gente y muchos tractores, ha sido pacífica más allá de esa presión para que nos dejaran pasar».

La salida

Roberto Rodríguez, procedente de La Moraña, ha pasado cuatro horas parado delante del Museo del Prado, «hemos entrado en Madrid pero no sé cuándo vamos a salir, nos va a costar porque hay mucha gente».

En su caso se muestra «satisfecho por entrar en Madrid y que la gente nos haya visto y escuchado», dice que en su caso, «donde he visto más polémica ha sido en el Alto del León porque ha habido a mucha gente que no la han dejado pasar, por lo menos a 100 tractores, y se ha vivido mucha tensión con la Guardia Civil y la Policía Nacional».

Jesús Manuel González Palacín, coordinador de UCCL, habla de una participación «tremenda, un éxito» y cifra la movilización en más de 12.000 personas a pie y 500 tractores, «alrededor de 300 han quedado fuera, no les han dejado entrar». En principio, estaba previsto que desde la región llegaran a Madrid 200 tractores y 20 autobuses aunque, finalmente, no todos han accedido.

Según sus palabras, «la subdelegación del Gobierno ha dado órdenes a la policía para que hicieran mucha presión desde el minuto cero, a las seis de la mañana ya estaban en todos los puntos de salida para retrasarnos». En algunos casos, los participantes no han llegado hasta el mediodía a Madrid, cuando la idea era hacerlo sobre las 9:30 horas.

González Palacín confirma «algún contusionado en la Puerta de Alcalá, cuando han cargado; la Guardia Civil y la Policía Nacional tenían órdenes para boicotear la movilización, en cambio la Policía Local y los propios madrileños nos han dado un trato muy bueno».