Secciones
Servicios
Destacamos
A finales de abril, a pesar de que nunca se puede hablar del 100%, se dará por finalizada la siembra de patatas en la región. En esta recta final y todavía sin datos oficiales, se da por hecho que se mantendrá la superficie de la ... campaña anterior, unas 16.600 hectáreas, y eso que allá por el mes de enero las previsiones no eran demasiado optimistas con respecto a este cultivo.
«La siembra se ha adelantado mucho y se ha apretado demasiado», comenta Eduardo Arroyo, presidente de Appacyl (Asociación de Productores de Patata de Castilla y León), lo que significa que «la gente ha sembrado a primeros de marzo, cuando lo lógico es hacerlo a mediados o finales y lo que está sembrado a día de hoy es lo mismo que había a finales de marzo, entre el 70 y el 80% de la superficie». A esta situación ha contribuido el hecho de que el terreno estuviera saneado, en buenas condiciones para ejecutar las siembras.
Todavía es pronto para aventurar qué pasará cuando allá por el mes de julio se comience a arrancar la patata en Castilla y León, pero los que conocen el sector ya adelantan que es probable que toda la patata se dé a la vez, «esto nos puede traer ciertas consecuencias porque no hay nada escalonado».
Yolanda Medina, presidenta de la Interprofesional de la Patata de Castilla y León, añade que «en tres semanas estaba sembrada el 60% de la patata de la región».
Aprecia que la tendencia es «a ciclos cortos por el coste del riego, por lo que vemos más cantidad de variedades tempranas y un incremento de la variedad agria en el caso de las tardías».
Noticia Relacionada
Reconoce que en el mes de enero «se pensaba que iba a producirse una bajada de la superficie de patata en favor de la remolacha pero va pasando el tiempo y vuelve todo a una calma rara, yo creo que la superficie va a ser muy parecida a la del año pasado».
Por otra parte, aquellas zonas que dependen del Pisuerga-Bajo Duero verán limitada hasta los 3.500 metros cúbicos por hectárea la dotación de agua y en palabras de Medina, «esto sí que se ha notado en algunas zonas donde ha habido una ligera reducción de las siembras, en cambio en otras se ha mantenido».
Sin contratos
Otra cuestión que detectan estos profesionales es que este año los agricultores están rechazando hacer contratos, algo que para Arroyo es un retroceso, «vamos hacia atrás porque había costado mucho mentalizarnos de que el contrato regula el precio».
Sobre la evolución del cultivo, todavía están naciendo las primeras patatas que se sembraron, «el hielo nos tiene en jaque, las que están saliendo ahora mismo son de alto riesgo».
De igual modo, los agricultores tampoco pierden de vista los altos costes que han tenido que asumir esta campaña, algo que ya sucedió la pasada. «Quizás en el tema de la luz pueda estar la cosa un poquito mejor, pero los fertilizantes siguen muy altos», según los cálculos de Arroyo, «una hectárea tiene unos costes de 10.000 euros cuando antes de la pandemia, que siempre nos sirve de referencia, estaban entre 6.000 y 6.500 euros».
Appacyl celebró una jornada ayer en Medina del Campo en la que se abordó el nivel de riesgo de las explotaciones; los fitosanitario en el cultivo de la patata y también se planteó la situación del mercado internacional de la mano del presidente de la interprofesional francesa de la patata, Paco Moya.
La interprofesional de la patata de Castilla y León finalmente no seguirá adelante con un proyecto europeo para la promoción de este cultivo dotado con 1.275.000 euros.
Tras competir con iniciativas de otros países y pasar un complejo proceso de selección, la asociación se hizo con la concesión de este proyecto cuyo objetivo era fomentar el consumo de la patata con un aspecto externo visual, que es lo que está provocando el clima, distinto al de hace una serie de años.
La segunda parte era que esos fondos europeos financian el 70% del proyecto y el 30% restante debía salir de la propia interprofesional, en ningún caso pueden ser directamente ayudas públicas. «En la votación que hicimos en la interprofesional no se estaba de acuerdo en tirar para adelante sin tener ese 30% de la financiación, así que lo rechazamos», comenta la presidenta de la interprofesional, Yolanda Medina.
En su opinión «se ha perdido una oportunidad de oro para transmitir cómo son nuestras patatas, que se tome conciencia de qué pasa con el clima y cómo influye externamente».
Se muestra convencida de que «oportunidades habrá en el futuro, luchamos por un proyecto y lo conseguimos, salen todos los años, pero hay que hacer labores desde el inicio desde el punto de vista del compromiso», concluye la presidenta. Esos fondos se hubieran utilizado para promoción en diferentes soportes.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La proteína clave para la pérdida de grasa
El Comercio
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.