La región afronta la siega de cereal con 13.600 cosechadoras y el gasoil 0,40 euros más caro

En estos días ultima «pequeñas revisiones» para que la máquina esté a punto cuando empiece a sonar el teléfono y los agricultores avisen de que es el momento óptimo para empezar.

En Castilla y León, según los últimos datos de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, hay un censo d 13.676 cosechadoras de cereales y, sin duda, es la provincia de Burgos la que marca la diferencia con 3.980 máquinas. En la zona de Tordesillas, que es en la que se mueve Valentín, calcula que a partir del 20 de junio comenzarán a cosechar alguna cebada, «pero en la zona sur, la de Medina del Campo, quizás antes porque está bastante mal el cereal».

Pero el inicio de la campaña siempre tiene como referencia la localidad abulense de Madrigal de las Altas Torres, donde pueden concentrarse entre 16 y 18 cosechadoras.

Luis Miguel Albarrán, vecino de Blascomillán (Ávila), se ha comprometido a tener su máquina en Madrigal mañana sábado.«Luego empezaré cuando me avisen, puede ser lo mismo el sábado que el lunes, pero de la semana que viene no pasa», señala. Coincide con su colega en que es un año «complicado» también para ellos, con el gasoil alrededor de 0,42 euros más caro que hace un año. «He llamado para pedir gasoil y después del descuento se queda en 1,12 euros el litro, cuando hace un año estaba a 0,70 euros». Pero no solo el gasto en gasoil dificulta la campaña, «nos han subido los repuestos, las horas de taller, el desplazamiento, las dietas», por lo que ya adelanta que «habrá que hacer una subida del precio de la siega para poder afrontar la campaña».

Dudas con los repuestos

Atoda esta situación añade el «miedo» a que surja una avería y no consiga los repuestos necesarios pues los tiempos de espera se han ampliado de manera notable en los últimos meses. «El pedido que hacemos en precampaña, allá por el mes de diciembre, nos lo han respetado, pero tengo miedo de que haga falta alguna pieza que no esté en stock y eso nos tenga parados; no trabajar durante tres o cuatro días supone un coste muy grande».

Si la campaña es normal y las lluvias no dificultan la siega, la de Albarrán se extenderá durante unos 40 días. Fijar un precio medio para estas máquinas es imposible: «Las hay de 400.000 euros y de 180.000 nuevas, depende de lo que vayas a segar».

En cualquier caso, afirma, «hacen falta muchas campañas para amortizar una máquina y, normalmente, lo que haces es entregar una máquina por otra si no, es inviable, desde cero no se puede». Este año se han sembrado en Castilla y León 1.917.263 hectáreas de cereal (excepto maíz), lo que supone 80.410 hectáreas menos que la campaña anterior.

Las previsiones de cosecha eran buenas hasta el mes de mayo, momento en el que las altas temperaturas han arrebatado en a penas 15 días buena parte del cereal.