Pala y tractor para salvar a una vaca atrapada en el lodo

La situación se puede interpretar como una anécdota, pero estos ganaderos ponen el acentro «en todos los problemas que nos supone la falta de agua». Además de tener que suministrar agua al ganado con cisternas, en este caso, «la vaca se metió en la charca y como no hay agua se quedó hundida por lo que la hemos tenido que sacar con el tractor», insisten, «es la única manera que teníamos de salvarla si no, se iba a morir».

Aunque la situación de sequía afecta a toda Castilla y León, Salamanca es la provincia donde ha pegado más, es la más ganadera, y desde el año 1992 no se recuerda nada parecido.

En las charcas donde es posible, los ganaderos intentan llenarlas con cisternas, pero de cualquier modo, esta situación acarrea gastos añadidos a las explotaciones que tienen que movilizar sus propias cisternas o contratar este servicio.