Las organizaciones agrarias medirán su representatividad el próximo mes de febrero

La Consejería está actualmente llevando a cabo las actuaciones que se han de realizar en la celebración de este proceso que está previsto para febrero de 2023, «siendo una prioridad dentro del gasto del programa de la Administración General Agraria, de modo que el proceso se desarrolle de manera correcta y se pueda disponer de la nueva representatividad que el proceso electoral determine en los distintos órganos de diálogo con la Consejería», informan fuentes de Agricultura.

Esto Consejo Agrario ha servido, además, para que Dueñas y todo su equipo presenten el presupuesto de la Consejería a los responsables de las organizaciones agrarias, un programa que se detalló en las Cortes el pasado viernes.

Dueñas ha destacado el carácter inversor de estos nuevos presupuestos, tanto en actuaciones colectivas como individuales en las explotaciones, con el objetivo de «liderar la modernización y la vanguardia de las producciones en Castilla y León». Ha reiterado, además, «su compromiso con la defensa de la competitividad del sector primario, agrícola y ganadero, y con el sector agroindustrial de Castilla y León».

Algunas de las medidas de apoyo al sector destacadas en los presupuestos y expuestas han sido los seguros agrarios, la formación y asesoramiento y la incorporación de jóvenes al campo, la modernización de explotaciones, mejora de infraestructuras rurales y modernización de regadíos y la apuesta por la producción de calidad y la agroindustria, con nuevos planes estratégicos.

Asaja pide al consejero que «cumpla los compromisos»

La organización agraria Asaja ha pedido al consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural al término del Consejo Agrario «que cumpla los compromisos anunciados con los agricultores y ganaderos y que siguen sin ser resueltos». Entre ellos, tal como ha subrayado Donaciano Dujo, presidente regional de la organización profesional agraria, están las ayudas a sectores afectados por la guerra en Ucrania, «14,2 millones de euros que anunciaron a bombo y platillo hace dos meses y no sabemos si llegan con retraso o directamente han desaparecido».

Pero también «siguen sin conocerse los compromisos de las ayudas agroambientales que deben cumplir los cultivos y las producciones ganaderas, a los que tienen que atenerse las siembras que ya están realizando los agricultores, porque es tiempo de ello y el campo no sabe de plazos y burocracia».

Desde la organización han insistido que en otras Comunidades Autónomas ya han publicado sus excepcionalidades, «en Castilla y León no se conoce aún de qué forma se flexibilizarán las normas de la nueva PAC, los límites en los que deben trabajar los agricultores y ganaderos en sus tierras, que ya están sembrando desde hace semanas».