La Junta abre la puerta a que veterinarios privados efectúen saneamientos ganaderos

En la citada propuesta, a la que se pueden hacer alegaciones hasta mañana ya que se ha tramitado por la vía de urgencia, hay dos grandes cuestiones que preocupan, al menos, a los profesionales más próximos al sindicato veterinario de Castilla y León. Una de ellas hace referencia a que «sin perjuicio de la competencia general otorgada a los Servicios Veterinarios Oficiales, en determinados casos, veterinarios distintos a estos, y siempre que así lo permita la normativa vigente, puedan realizar actuaciones de saneamiento siempre que sean previamente habilitados mediante resolución del titular de la Dirección General con competencias en materia de sanidad animal».

Este aspecto, que se justifica en la orden en que haya una mayor «celeridad» en el ejercicio de las actuaciones, se entiende por los veterinarios próximos al sindicato veterinario como un asunto que puede generar «un conflicto de intereses» pues un veterinario libre, que de manera habitual atiende una explotación, podría ser el mismo que realizara pruebas como la de la tuberculosis en el saneamiento ganadero. «Cualquier veterinario podría actuar en estos programas, no se puede ser juez y parte, la interpretación de unos resultados se basa en la capacidad técnica, objetividad e independencia y no dudo de ningún compañero, pero para que no haya duda tiene que ser un funcionario público el que lo haga».

Añaden estas mismas fuentes que experiencias similares se han llevado a cabo en comunidades como Castilla la Mancha «cuya prevalencia de positividad está muy por encima del resto».

La situación de los jefes de sección

Otro asunto que ha levantado ampollas es que se pretende designar un director regional y un coordinador provincial para llevar a cabo los diferentes programas especiales de acción sanitaria cuando hasta ahora eran los jefes de sección provincial los que eran los directores de las campañas. «Se inventan una figura que no está en la estructura orgánica ni en la relación de puestos de trabajo», detallan las mismas fuentes, «parece más bien una especie de vendetta por lo que firmaron a la anterior modificación». Esas palabras se refieren al informe que rubricaron los nueve Jefes de Sección de Sanidad y Producción Animal de cada una de las provincias de Castilla y León donde, allá por el mes de mayo, hablaban de las «deficiencias» en las que había incurrido la Junta de Castilla y León en su última resolución en materia de sanidad animal.

Según recoge la propuesta de orden, el objetivo de ese punto es lograr «una mayor efectividad en la consecución de los objetivos sanitarios».

Por todos estos motivos, fuentes del sindicato veterinario de Castilla y León confirman que harán alegaciones y ponen el foco en que algunos puntos de los que se plantean ya están derogados desde hace tiempo y todo ello sin dejar de reconocer que «es necesario modernizar la orden un poco, pero esto es disruptivo, deja todo con mucha inconcreción y lo que concreta menoscaba el trabajo de todos estos años».

Desde la Consejería de Agricultura insisten en que se tendrán en consideración todas las alegaciones recibidas y «serán escuchadas sus reclamaciones cuando lleguen».

Por su parte, desde el Colegio Autonómico de Veterinarios de Castilla y León se ha mandado la orden a los nueve colegios para que la estudien y se vea si se aplica la normativa vigente, «que se entiende que sí». Destacan que «no se puede obviar la necesidad de veterinarios en el campo», pero recuerdan que cada vez son menos los que se dedican a la veterinaria clínica por lo que «si no hay gente, la orden puede chocar con eso», haciendo así, un plantemiento totalmente diferente al anterior.