Los fabricantes de piensos muestran su temor a la especulación, «no a la provisión»

A pesar de que alrededor del 95% de la materia prima que utilizan las fábricas de pienso de la región procede de la propia Comunidad, el sector muestra abiertamente «miedo a la especulación, no a la previsión».

Esas palabras son de Agustín de Prada, director de la Asociación de Fabricantes de piensos compuestos de Castilla y León (Asfacyl), que deja claro que España «necesita importar materias primas y ya se buscan otras alternativas a lo que viene de Ucrania en lugares como Canadá, Argentina o Estados Unidos».

Estos fabricantes han mantenido un encuentro esta semana en el Ministerio y el próximo día 9 volverán a reunirse con estos los representantes, pero de Prada insiste en que «no vemos riesgo de que nos falten materias primas, lo único que tendremos que ir a buscarlas a otro sitio».

Subida en las lonjas

La especulación a la que hace referencia ya se ha dejado notar esta última semana en la cotización de las lonjas. Desde el punto de vista más cercano, en Salamanca se marcaron subidas de hasta seis euros en los cereales y en León, de entre 15 y 24 euros. En este último caso, ni siquiera hubo acuerdo para cotizar el maíz, la materia prima que más se importa de Ucrania. La lonja de Zamora tampoco le puso precio a los cereales.

Es verdad que Castilla y León siempre ha sido el granero de España y que las materias primas de los piensos proceden en un 95% de la región, pero «aunque nosotros prácticamente nos autoabastecemos esto no quiere decir que no nos afecte, lo hace y directamente, porque si no hay otras opciones, vendrán a cogerlo aquí».

Jorge de Saja, director general de CESFAC (Confederación Española de Fabricantes de Alimentos Compuestos para Animales), recuerda que España «es muy dependiente de la importación de materias primas en general, para hacer el alimento para el ganado». La cifra varía dependiendo del año, pero esas importaciones se mueven entre el 40% y el 60%. Ucrania no es solo el principal proveedor desde hace años, «es que todas esas materias vienen en un periodo muy concreto, el primer semestre del año».

De Saja suma a la situación actual, con las expediciones totalmente interrumpidas, el hecho de que aunque mañana se pudiera restablecer ese suministro «los expertos dicen que se tardarían semanas» dado que están dañadas las infraestructuras, tampoco cuentan con recursos humanos o barcos.

Precios disparatados

Para ese abastecimiento en el corto plazo, coincide en que hay que pensar en importar de Argentina, Estados Unidos y Canadá. «Esas materias primas no iban a llegar por causas técnicas, requerían unas acciones excepcionales, y se ha solicitado que se autorice la importación». Las empresas también se están conteniendo a la espera de acontecimientos, «los precios están en niveles disparatados, se ha producido un incremento de entre el 20 y el 60% y sigue subiendo, la situación es más que preocupante».

Más a medio plazo han propuesto que en el momento que se pueda restituir el flujo de comercio «se haga de la manera más ágil posible, que se facilite».

El 30% del maíz que importan los fabricantes de piensos procede de Ucrania a lo que hay que añadir el 20% del trigo y el 36% de la torta de girasol.