La campaña de recogida de remolacha entra en la recta final con buenos rendimientos

Acor tiene dividida la superficie en módulos y el 70% de las hectáreas están sujetas a este sistema logístico que garantiza el abastecimiento a la fábrica durante toda la campaña. «El 95% de la hectáreas que están en módulos están arrancadas, nos quedan 346; del otro 30% también está el 90%, por lo que prácticamente toda la remolacha se va a arrancar a primeros de enero si el tiempo nos deja».

Buen ritmo

La previsión es terminar la campaña en la segunda quincena de enero, teniendo en cuenta que de las 11.440 hectáreas contratadas más del 75% ya se han arrancado. «Estaba programado no llegar a los cuatro meses y nos va a quedar un mes».

Óscar Olivar concreta otra serie de aspectos como el meteorológico: «Ha sido una campaña que nos ha dejado trabajar, pues en octubre prácticamente no llovió nada y hemos podido tener siempre remolacha acumulada en el campo para garantizar el abastecimiento; salvo alguna avería, el ritmo de la fábrica ha sido bueno». El técnico recuerda, además, que los días en los que la nieve hizo acto de presencia en noviembre «ha sido muy grande la colaboración de los transportistas y de las empresas con las que trabajamos para garantizar la campaña».

En cuanto a la polarización (concentración de sacarosa en la raíz), sin ser el dato definitivo hasta el cierre, se sitúa en 17,64 grados, «un buen registro, superior al del año anterior, que es reflejo de la sanidad foliar del cultivo; el año pasado la cercospora fue más alta y esa es una de las principales causas».

El descuento medio se sitúa en el 10,23%, similar al de la campaña anterior, y el rendimiento va a oscilar entre las 105 y las 108 toneladas tipo por hectárea. «Somos optimistas con los rendimientos, en general hay buena producción y eso es muy importante para la continuidad y rentabilidad del cultivo». La previsión es que una vez cerrada la campaña se hayan recepcionado en Olmedo entre 1.070.000 y 1.100.000 toneladas.

Balance optimista

En el caso de Azucarera, Salomé Santos, directora del Área Agrícola de la compañía, confirma que «entre el martes y el miércoles de la semana que viene terminaremos de recibir toda la remolacha en la fábrica de Toro». Incide en que la campaña, en lo que al balance general se refiere, «va a ser bastante buena en rendimiento y polarización, no es de récord, pero está dentro de la media alta de los últimos años».

Confían en alcanzar las 110 toneladas tipo por hectárea, con una polarización de 18, «un buen dato en comparación con otros años». La fábrica toresana va a recepcionar 3.500 hectáreas, aunque también se ha desviado parte de la superficie de La Bañeza.

Explica Salomé Santos que en el caso de Miranda de Ebro (Burgos), «estábamos a punto de terminar pero hemos tenido una pequeña parada, no de la fábrica, que está procesando jarabe, pero sí de la remolacha debido a las inundaciones que han sufrido Álava y La Rioja».

Por lo tanto, en la fábrica mirandesa faltan por entrar alrededor de unas 450 hectáreas de estas provincias «pero las de Álava, por lo menos, tendrán que esperar 15 días para poder entrar y rematar».

El balance que hace de la campaña en esta fábrica es «bastante positivo», pues calculan rendimientos de 102 toneladas tipo por hectárea y una polarización de 15,5 grados, «un buen dato para Miranda».

Por último, La Bañeza (León) abrirá las puertas «nada más terminar la Navidad, esperamos comenzar sobre el 18 o 20 de enero», sostiene. Azucarera ha hecho un trasvase de la superficie más difícil de esta zona a Toro «y eso no va a comprometer la apertura temprana de la fábrica». En términos globales, concluye que hasta ahora «la campaña ha sido buena, sin grandes contratiempos a excepción de esas tormentas de Álava y habrá un buen rendimientos agronómico».

Santos adelanta que la subida del precio del azúcar se va a traducir en mejores liquidaciones para el agricultor. Ya se está anticipando el complemento vinculado al precio del azúcar, que es de dos euros.