Seis personas fallecieron mientras trabajaban en Burgos durante el primer semestre de 2019, cinco más que en el mismo periodo del año pasado. Los sectores de la construcción y los servicios se cobraron dos vidas cada uno y la industria y el campo de ... la provincia, uno, respectivamente.
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Así lo recoge el informe de la siniestralidad laboral de la Junta de Castilla y León, que refleja también un aumento de la gravedad de los incidentes. La cifra total de sucesos desde el 1 de enero al 30 de junio fue de 7.912, un 3,44% menos, pero los accidentes que derivaron en baja fueron 2.929, un 4,61% más.
2.901 de estos sucesos fueron de carácter leve y 22, graves. En este último caso se anotó una caída del 4,35%, si bien, en términos absolutos, el descenso es solo de un accidente. Por el contrario, los incidentes leves crecieron un 4,50%, lo que se traduce a una subida de 131 sucesos.
La mayor subida tuvo lugar en el mundo de la construcción. Los accidentes con baja en la obra se incrementaron en un 63,43%. De 216 percances en el primer semestre de 2018 se pasó a 353 en 2019. Casi la totalidad, 350, fueron leves y uno, grave. Uno de los fallecidos trabajaba en la construcción de edificios y el otro, en actividades de construcción especializada.
Por su parte, la siniestralidad laboral agraria ascendió un 14,91% hasta los 131 accidentes. 127 de ellos fueron leves y tres, graves. El trabajador muerto en el primer semestre pertenecía a la rama de agricultura, ganadería, caza y actividad de servicios conexos.
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El secretario provincial de CC OO Burgos, Ángel Citores, ha calificado de negativos los datos del informe de siniestralidad laboral de la Junta de Castilla y León por el aumento de fallecidos y la «importante cantidad de accidentes leves».
«La subida se da en casi todas las ramas. Es una cuestión preocupante» ha comentado Citores, que especialmente ha alertado del espectacular crecimiento en la construcción. De hecho, el incremento porcentual de percances en este sector en Burgos es superior al doble registrado en Castilla y León.
Ante esta situación, el secretario provincial de CC OO Burgos ha explicado que «hay que seguir trabajando a fondo y tomarse en serio la prevención para que no haya ningún accidente».
En el sector servicios fue el crecimiento de los percances fue del 0,16%.En este caso, se registraron 1.239 accidentes, de los cuales 1.232 fueron leves y cinco, graves. Los dos fallecidos se empleaban en el transporte terrestre.
Por el contrario, los datos fueron algo más positivos en la industria y durante el recorrido de ida y vuelta al lugar de trabajo, que también se incluyen en esta estadística. La caída del 2,22% deja en 1.014 el número de accidentes producidos en el sector secundario burgalés. 1.004 fueron leves; nueve, graves y uno, que tuvo lugar en la rama de fabricación de productos no metálicos, mortal.
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La industria es el único sector en el que la cifra de fallecidos no crece entre el primer semestre de 2018 y 2019, ya que la persona que murió entre enero y junio del año pasado trabajaba en actividades de la gestión de residuos.
Por último, el número de accidentes laborales in itinere descendió un 2,04% hasta los 192, siendo 188 leves y cuatro, graves.
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