Yolanda Hernández padeció hace unos años una leucemia que junto a otras complicaciones le hizo necesitar un trasplante. Desde hace cinco años viaja de manera habitual hasta el hospital de Salamanca para recibir el tratamiento más adecuado para su recuperación. Lo hace en ambulancia, pues ... nadie puede llevarla hasta tierras charras.
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En la actualidad, completa los 241 kilómetros que separan las dos ciudades dos veces al mes. El servicio de transporte de pacientes, que «siempre ha funcionado bastante mal», continúa «siendo denunciable» según detalla esta paciente. Y no es que el pasado miércoles ocurriera nada especial, pero sí sintió que la gota colmaba el vaso.
«La ambulancia en la que iba no tenía calefacción», en una jornada en la que la temperatura en las primeras horas de la mañana era de 3 grados bajo cero. Estas deficiencias no son algo nuevo, en otras ocasiones lo «que no funciona es el aire acondicionado, otros días fallan las escaleras para subir a la ambulancia».
«La ambulancia no se ha estropeado hoy, ayer ya estaba rota», lamenta Yolanda, que asegura que el técnico en transporte y emergencias sanitarias le confirmó que en la jornada anterior la calefacción ya no funcionaba en el desplazamiento hasta Madrid que realizaron. Además de no funcionar la calefacción, el mal estado del vehículo provocaba que un agujero en la puerta hiciera bajar aún más la temperatura interior, tal y como señala esta paciente.
Y a pesar de todo, tras la llegada de la pandemia siente que el servicio ha ganado en seguridad. «Antes nos traían a todos juntos, daba igual que la hematóloga te dijera que tenías que viajar aislado. Ahora, por la covid-19 voy sola, pero con unas ambulancias en condiciones pésimas», explica Yolanda Hernández. Esta situación las denunció con anterioridad a la Gerencia de Salud antes de que llegara la pandemia, pero ni «actuaron» ni recibió nunca «una contestación a las denuncias».
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El pasado martes Yolanda volvió a ponerse en contacto con la Gerencia para informar de lo sucedido con la ambulancia que la trasladaba hasta el hospital de Salamanca, una vez más la instaron a presentar la correspondiente denuncia para la que la citaron el próximo lunes. «Las condiciones son malísimas, vas aguantando porque tienes que viajar, pero no puede ser. Seguro que hay más gente a la que le pasa y si no lo denunciamos esto no va a cambiar», afirma.
Desde CCOO confirman el mal estado de algunas de las ambulancias y denuncian que desde la empresa, Ambuibérica, «recortan gastos tanto en el salario de los trabajadores como en el mantenimiento de los vehículos» para obtener mejores condiciones «económicas».
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Las reclamaciones sobre transporte sanitario corresponden a la Gerencia de Área, que explica que si un paciente la presenta en la de Primaria, en la del hospital, o en la propia ambulancia, ellos las remitirán a la gerencia de área, que es donde corresponde. En el caso de Yolanda, detallan desde Sanidad, el procedimiento cuando llegue esta reclamación por parte de la Gerencia, será ponerse en contacto con la empresa para trasladárselo.
En este caso, la empresa tendrá diez días para ofrecer una respuesta y entonces la Gerencia hará una valoración para tomar las medidas oportunas y ofrecer una respuesta a la paciente.
BURGOSconecta ha intentado ponerse en contacto con la empresa para reflejar su postura al respecto pero no ha conseguido obtener una respuesta.
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