La provincia de Burgos regresa a riesgo bajo

Sin embargo, este descenso no fue suficiente como para que el nivel de riesgo bajara de alto y un nuevo aumento de casos devolvió a la provincia a riesgo muy alto el 31 de marzo. Ahí se mantuvo, de nuevo, hasta el 14 de mayo.

Con la llegada de junio parecía que todo comenzaba a mejorar y la provincia descendía un escalón más para situarse en riesgo medio, así como comenzó el año. Pero este descenso se vio arrasado por la llegada de la quinta ola, que en apenas dos jornadas pasó de riesgo medio a muy alto, donde se estableció del 3 de julio al 28 de agosto.

Las peores cifras de incidencia acumulada de la pandemia pertenecen a este mes, cuando el día 19 la tasa alcanzaba los 1.671,75 casos por 100.000 habitantes. Esta cifra no fue solo el récord del mes y de la quinta ola, sino que es hasta el momento la tasa de incidencia acumulada a 14 días más alta desde que la Junta ofrece este registro desde noviembre de 2020.

El ascenso rápido de contagios propició este aumento de la incidencia, sin embargo, el descenso de esta cifra, usada durante toda la crisis sanitaria para establecer medidas sanitarias, es un proceso mucho más lento.

Con la contención de los nuevos casos llegó también el descenso moderado de la incidencia acumulada, que poco a poco disminuía. De riesgo muy alto se pasó a alto y de ahí a medio. El 23 de septiembre la tasa de incidencia a 14 días entraba en riesgo bajo por primera vez en todo el 2021. Ahí permaneció hasta el 28 de septiembre. Después, de nuevo la incidencia acumulada ascendió hasta el riesgo medio hasta hoy, cuando con 48,37 casos por 100.000 habitantes vuelve a descender hasta riesgo bajo.

Con esta es la séptima jornada en la que la provincia entra en este nivel de riesgo, aunque todavía no ha alcanzado el nivel denominado nueva normalidad por la Junta de Castilla y León.

El descenso de nuevos positivos ayuda también a que la situación en los hospitales de la provincia mejore. En el Hospital Universitario de Burgos (HUBU) tan solo hay tres pacientes con covid hospitalizados en planta, mientras que en la UCI se mantienen otros tres pacientes.

En Miranda de Ebro, el Hospital Santiago Apóstol, tienen a otros dos pacientes con covid hospitalizados, mientras que en Aranda de Duero, en el Hospital Santos Reyes, no permanece nadie ingresado por la infección.