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El Plan de Contingencia de la Consejería de Sanidad prevé una reducción de habitaciones hospitalarias abiertas durante el verano. Algo habitual durante el verano que se debe a una reducción de actividad al haber mucha población de vacaciones, cirugías pospuestas y menor programación de consultas ... y pruebas.
El cálculo de la administración prevé una reducción de 377 camas en los 14 hospitales de la región. En cambio, las cifras que maneja el Sindicato de Enfermería (SATSE) son superiores. SATSE denuncia que se prevén cerrar 466 camas hospitalarias en Castilla y León.
Según las cifras que maneja el sindicato, en la provincia de Burgos se prevén cerrar 186 camas hospitalarias entre el hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro y el Hospital Universitario de Burgos (HUBU). Desde SATSE se apunta que esos datos se extraen de las comunicaciones que están obligados a realizar los gerentes de los hospitales a la Junta de Personal.
Fuentes sanitarias explican que esta es una previsión que se hace todos los años, «teniendo en cuenta que en verano siempre bajas las hospitalizaciones y también hay menos personal debido a las vacaciones». Esta es una previsión de lo que podría ser esa reducción para poder organizar el trabajo en las unidades. «Evidentemente, nadie que lo necesite se queda sin ingresar porque se cierren camas», aseguran esta fuentes sanitarias, «esta es la planificación normal que se hace en cualquier organización en los meses de verano».
Actualmente, según las comunicaciones de los delegados sindicales de SATSE, en el Santiago Apóstol hay cerradas unas 28 camas, «14 en Q1 desde el 15 de junio y hasta el 30 de septiembre y otras 14 en Medicina Interna desde el 1 de junio y hasta el 30 de septiembre», aseguran desde el sindicato. «Pero han tenido que abrir algunas camas porque se necesitaba», confirma Mercedes Gago, secretaria general de SATSE Castilla y León.
Por su parte, Gago apunta que, según las comunicaciones de los delegados sindicales, el HUBU ya tiene cerradas unas 50 camas, dentro de este Plan de Contingencia. «La previsión es que se cierren 10 camas por unidad, pero no creemos que vaya a ser viable, porque están volviendo a aumentar los ingresos por covid», añade Gago.
Desde SATSE se apunta que las cifras que manejan es una cifra global «a la baja, ya que en distintos centros y servicios no han querido dar los datos, argumentando que dependerá de la evolución futura de la situación».
SATSE estima que el cierre de 8.594 camas en el conjunto del país supondrá la pérdida de más de 73.460 estancias hospitalarias, mientras hay más de 706.000 personas esperando ser operadas en la sanidad pública, según los últimos datos oficiales del Ministerio de Sanidad. «Cerrar camas conlleva que en los hospitales no se puede garantizar una atención y cuidados óptimos al conjunto de la ciudadanía que, lógicamente también enferma y tiene problemas de salud en verano que no pueden esperar a después de septiembre», se añade desde el Sindicato de Enfermería.
En cuanto a los refuerzos, la Consejería de Sanidad añadirá con cuatro enfermeros a algunos equipos de los centros de salud de Burgos. Sacyl reforzará la Atención Continuada de Burgos. con cuatro médicos y ocho enfermeros
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