Pacientes sin vacunar y casos graves en menores de 40, el perfil del ingresado en el HUBU

Y entre los perfiles de los pacientes hay dos que destacan de manera especial. Por una parte, se trata de los menores de 40 años, sin vacunar y que presentan cuadros graves, según la información facilitada por la propia Gerencia del centro hospitalario, que ha hecho un llamamiento a la población burgalesa para que colabore a la hora de contener la quinta ola de la covid-19.

Explican que, si bien es cierto que la enfermedad cursa con menos gravedad entre los más jóvenes, la incidencia acumulada afecta principalmente a los burgaleses entre 20 a 39 años. Y teniendo en cuenta que se han superado los 2.000 casos por 100.000 habitantes en la capital (y 1.600 en la provincia), se trata una «incidencia elevadísima que conduce , por mera estadística, a un aumento de la presión asistencial».

Así, los pacientes ingresados en el HUBU son muchos de ellos jóvenes de 20 a 39 años con cuadros graves. También ha llegado la incidencia al grupo de edad de 40 a 60 años, y los ingresos afectan a mayores no vacunados o que no han completado la pauta. Mientras, los mayores con la pauta completa que han acabado en el HUBU presentan cuadros leves «en su gran mayoría», aunque son casos delicados por su naturaleza.

Unos datos que evidencian la eficacia de la vacunación a la hora de reducir la gravedad de las infecciones y los casos de muerte, recuerda el HUBU. Aun así, pide responsabilidad porque la elevada incidencia y el aumento de brotes lleva también a un aumento de la presencia del virus en las residencias de mayores, poniendo de nuevo en riesgo a esa parte de la población que se libró del virus tras vacunarse.

La elevada presión asistencial ha obligado al HUBU a ampliar a cinco el número de plantas destinadas a la covid-19, detrayendo personal de otras áreas pues no se cuenta con suficiente plantilla (hay gente de vacaciones y las bolsas de sanitarios están vacías). La reorganización del personal, fundamentalmente de enfermería, ha obligado a suprimir cirurías, priorizando las no demorables.

Por otra parte, el HUBU reconoce que el servicio de Urgencias está saturado. Los profesionales hablan de haberse duplicado las entradas, principalmente por el aumento de las consultas covid. Y explica el hospital que, en muchos casos, son consultas por cuadros clínicos banales, es decir, que no deberían de llegar a Urgencias hospitalarias sino que corresponden al ámbito de la Atención Primaria.

Por ese motivo, desde el hospital se recuerda que si se tienen sítnomas se debe consultar telefónicamente con el centro de salud y solo acudir a Urgencias cuando sea necesario. Y, en cualquier caso, sin acompañamiento salvo que sea estrictamente necesario (menores, personas con discapacidad o dependencia), para evitar colapsos y minimizar los riesgos.