«España saldrá ganando si mejora sus relaciones con China»
Margaret Chen ·
La fundadora del China Club Spain explica que la crisis sanitaria puede frenar la globalización y provocará que muchos países reimpulsen sus industrias nacionalesSecciones
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Margaret Chen ·
La fundadora del China Club Spain explica que la crisis sanitaria puede frenar la globalización y provocará que muchos países reimpulsen sus industrias nacionalesLa crisis del coronavirus va a cambiar completamente las relaciones internacionales y China, que jugaba un papel clave, puede convertirse, si no lo es ya, en el gran actor del mundo. Margaret Chen es una de las chinas más influyentes en España. Ex alta ... directiva de Telefónica y antigua directora de la compañía en Asia, es fundadora y presidenta de honor del China Club Spain, una asociación sin animo de lucro formada por ejecutivos chinos que fomenta las relaciones comerciales y económicas entre ambos países.
-Para lo bueno y para lo malo, la emergencia de la Covid-19 ha mostrado el peso de China en el mundo.
-Para entender lo que está ocurriendo, tenemos que pensar en que todo ha cambiado en los últimos 20 años. La gente cree que China ha salido a conquistar el mundo, y no ha sido así. China ha sido invitada a participar en el mundo globalizado que ha diseñado Occidente. Después de quince años de larga negociación, la entrada de China e India en la Organización Mundial de Comercio (OMC) marcó un antes y un después. Allí comenzó un reparto de la economía en el que a los países más atrasados les tocaron las industrias básicas, una de cuyas consecuencias es que ahora estén más contaminados, y el diseño y la alta tecnología se quedaron en los desarrollados, Europa y Estados Unidos. Parecía una colaboración perfecta, y por eso ahora me sorprendo cuando dicen que China es el país que más contamina: claro, lo han elegido para eso.
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-Pero China ahora también es puntera en tecnología.
-Con esa base industrial de hace veinte años, poco a poco, China fue construyendo infraestructuras y se convirtió en la fábrica del mundo porque su población, además, es muy trabajadora. Una característica muy importante de China es que tiene la vista en el futuro, al contrario que Estados Unidos, que mira más en su beneficio a corto plazo. China empezó a fabricar componentes avanzados y ha invertido muy fuerte en el I+D tecnológico, comenzaron a nacer empresas unicornio como Huawei, Alibaba, Tencent o DJI y ahora el mundo occidental, liderado por Estados Unidos, se siente de alguna manera amenazado por los últimos desarrollos de China, como por ejemplo, la tecnología 5G, y empieza a tomar medidas para frenarlo.
-¿La globalización saldrá tocada de esta crisis?
-Trump quiere acabar con ella y el coronavirus le está haciendo un favor porque ya ni siquiera podemos viajar, por lo menos durante un tiempo. Además, países como España están descubriendo que ante la falta de mascarillas y respiradores, no pueden prescindir de las industriales de primera necesidad nacional y externalizar toda su producción. Siguiendo el ejemplo de Estados Unidos, muchos países van a volver a potenciar sus industrias nacionales. Este virus va a cambiar muchas cosas para siempre. La globalización también tiene que tener un límite, pero es necesaria porque ha permitido más avance económico y tecnológico y ha sacado a mucha gente de la pobreza en el mundo.
El coronavirus en cifras
Sara I. Belled óscar Chamorro
-¿Cómo se han adaptado las fábricas en China para responder a la demanda global de material sanitario?
-China fue el primer país en sufrir la Covid-19, sus factorías se ajustaron a la situación hace ya meses y por eso ahora estaban preparadas para la fabricación masiva. Además, el Gobierno ha potenciado este tipo de producción. Y es cierto que las mascarillas, por ejemplo, forman parte de la normalidad en los países asiáticos. Pero aun así, la situación es muy compleja. Todo el mundo quiere mascarillas, los distribuidores de Estados Unidos arrebatan en el último momento pedidos que ya se habían vendido porque pagan más y se producen peleas e incluso robos de las mercancías sanitarias en los aeropuertos. Pero también ha habido países más previsores que otros. Alemania compró en febrero 10.000 respiradores. En España se ha contagiado mucha gente, incluidos 30.000 sanitarios, por falta de material, y no disponemos de suficientes test. Todos reconocemos que el sistema sanitario español es muy bueno, pero ante una situación de desbordamiento de su capacidad, las cifras de contagio sanitaria y de mortalidad están dando una imagen negativa. España no estaba preparada para una emergencia así, y eso que esta es la crónica de un virus anunciado que se está moviendo continente a continente. China tomó las medidas drásticas con el cierre de Wuhan y ralentizó el proceso de propagación hacia el resto del mundo, pero muchos países no lo tomaron serio y han perdido tiempo en la prevención de la crisis.
-¿España se ha movido en China peor que otros países?
-Algunas empresas se han movido bien, pero como país, no ha sabido utilizar la vía institucional. El Gobierno y la administración española pueden hacer más. Desde mi punto de vista, que España se lleve mal con China es innecesario. Hay que fijarse en el ejemplo de los dirigentes de Reino Unido, Alemania y Francia, que aunque mantienen diferencias políticas, visitan China con más frecuencia y firman acuerdos comerciales e industriales. España saldrá ganando si mejora sus relaciones con China. Eso sí, tengo que decir que la labor de un gobierno en España ante una pandemia es muy complicada porque siempre lo van a acusar de que estar haciéndolo mal. Si hubieran decretado el estado de alarma antes, la gente se habría enfadado por cancelar las Fallas y la Semana Santa y cuando lo han hecho, les dicen que ha sido demasiado tarde. Pero estamos viviendo en el sistema democrático. En China el Gobierno decide todo y el resto ejecuta, la falta de democracia es un tema que nos pasaríamos mil años discutiendo, pero en el momento de una pandemia, funciona bien y el resultado es obvio.
Material sanitario. «Ha habido países más previsores que otros. Alemania compró en febrero 10.000 respiradores»
En China. «Algunas empresas se han movido, pero como país, España no ha sabido usar la vía institucional»
-¿Quién se está beneficiando del coronavirus?
-Las empresas y servicios online y el mundo digitalizado en general. Por ejemplo, servicios de Cloud y 'big data', las empresas en el mundo robótico y drones, las entidades de educación 'online' o las aplicaciones de videoconferencias como Zoom. Como industria, en el corto plazo, los fabricantes de material sanitario. Algunos pensarán que China se está beneficiando por tener a estos fabricantes, pero yo no creo en la teoría la conspiración de inventar un virus para ganar dinero después.
-¿China ha ocultado datos?
-No voy a decir que Wuhan no haya ocultado datos porque no lo sé, pero no me extrañaría que los datos no fueran completos. Hubo desbordamiento muy por encima de las capacidades de los hospitales y allí muchas murieron en sus casas sin posibilidad de identificar la enfermedad. Pero las estadísticas de España, Italia o Alemania también son discutibles porque cada país tiene sus criterios distintos de contabilizar los contagiados y fallecimientos. Espero que la Organización Mundial de la Salud ponga unos criterios uniformes para favorecer y fomentar los estudios científicos y obtener conocimiento sobre este virus.
-¿Cómo van a cambiar las relaciones de China con el mundo?
-Con algunos países mejoraran y con otros empeorarán. Pero van a ser muy diferentes. Una teoría es que China saldrá fortalecida porque está ayudando a los países más afectados. Estados Unidos ha acusado a varios países de haberse dejado «comprar» por las donaciones de los materiales sanitarios de China, pero ellos mismo no pueden ayudar a casi nadie porque están en plena crisis interna y no tienen suficientes fábricas de material sanitario. Y ese apoyo de China a más de cien países favorece la idea de la nueva ruta de la seda. La ayuda a Italia se explica en que éste fue el primer país europeo en adscribirse a este acuerdo, aparte de que ha apoyado a China en otras situaciones difíciles históricamente. Vuelvo al principio: China es la fábrica del mundo y muchos países envidian ahora su capacidad para producir material sanitario, pero eso no es por casualidad, es el resultado de reparto de trabajo dentro de la OMC. Y en China hay mucha gente que no entiende por qué el país está enviando millones de toneladas de material sanitario y a la vez, recibe críticas.
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