La incidencia acumulada se dispara hasta los 578 casos a dos semanas en la ciudad de Burgos

Así, la propia consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha subrayado hoy que Castilla y León se encuentra ahora mismo en «riesgo muy alto», con varios indicadores totalmente disparados. En el caso de la provincia de Burgos, por ejemplo, se habla de una incidencia acumulada a 14 días de 387 casos por cada 100.000 habitantes, que en el caso de la capital provincial se eleva hasta los 578 casos por cada 100.000 habitantes.

Ambas tasas son dos de las más elevadas de toda la comunidad autónoma, y vienen de la mano del vertiginoso incremento del número de positivos registrados en la última semana entre la población de 12 a 29 años, sin duda la gran protagonista de esta quinta ola de la que Casado ya habla abiertamente.

Se trata, no obstante de una ola con características diferentes a las anteriores, ha asegurado, ya que «la edad es el factor de riesgo más determinante» y el rastreo de los contactos entre jóvenes es «prácticamente imposible», ya que está relacionado en gran medida con la movilidad y el ocio nocturno.

En este sentido, Casado ha reconocido que por el momento, la alta incidencia de la enfermedad en los jóvenes no se ha trasladado de manera significativa sobre la presión hospitalaria. Sin embargo, ha advertido, la juventud «no garantiza» que no se desarrollen síntomas graves. De hecho, ha recordado, en la UCI del Hospital Universitario de Burgos hay ahora mismo una persona de 30 años ingresada.

También hay menores de 30 años hospitalizados en planta, tanto en Burgos como en el resto de la comunidad autónoma, lo que da muestra de que la covid-19 también afecta a esos grupos de edad.

A mayores, Casado ha advertido que esos positivos detectados en las últimas jornadas también tienen una influencia directa sobre el resto de edades, toda vez que muchos de «sus padres» aún no han completado la pauta de vacunación y pueden derivarse numerosos contagios en edades de mayor riesgo.

Habida cuenta de la situación, desde la Junta de Castilla y León ya avanzan la posibilidad de imponer nuevas medidas y restricciones. De hecho, el comité de expertos que asesora al Ejecutivo autonómico ya ha puesto sobre la mesa varias propuestas, empezando por la solicitud al Consejo Interterritorial de imponer nuevamente el toque de queda, siguiendo el ejemplo de Portugal.

A este respecto, Casado entiende que en el contexto actual es más efectivo acometer «medidas quirúrgicas» enfocadas directamente a atajar la dispersión del virus entre la población más joven. «Creo que es más selectivo y proporcional» que retroceder directamente a la fase 2 de la desescalada e imponer todas las medidas vinculadas al mismo, ha señalado. En todo caso, ha concluido, en las próximas jornadas -o incluso horas- se tomarán las decisiones que se considere oportunas en virtud de las herramientas legales de que dispone la Junta.