Illa estudiará endurecer las restricciones de Navidad si empeoran los datos

Illa ha considerado que las normas que acordaron el pasado miércoles el Ministerio de Sanidad y las comunidades son «drásticas» porque impiden la movilidad entre regiones «excepto para estar con familiares y allegados» y también ha recordado que las autonomías tienen margen para decretar más restricciones. «Si se cumplen las medidas que hemos pactado y se respetan las recomendaciones de mascarilla, distancia social e higiene de manos, la situación irá bien. Si no se cumplen estas medidas, habrá más casos, más ingresos en UCI y se acabarán produciendo más fallecimientos», ha advertido Illa.

El Ministerio y las comunidades pactaron que sean «las comunidades autónomas y ciudades autónomas las que harán efectiva la limitación de la entrada y salida en las autonomías y ciudades con estatuto de autonomía». También establecieron que el número máximo de personas (incluidos los menores) que podrán reunirse en Navidad será de diez, salvo que ya sean convivientes, y pidieron que sean sólo de dos núcleos familiares. Además, fijaron el toque de queda a la 1.30 de la madrugada en Nochebuena y Nochevieja. Quedar en parques a pasear, en lugar de en lugares cerrados, y felicitarse las fiestas por videollamadas, en lugar de en personas, son propuestas que también ha realizado Sanidad.

La definición de 'allegado', que permite muchas interpretaciones, vuelve a estar en el centro del debate. Para el ministro de Sanidad, allegada es aquella persona «con la que se mantiene una relación afectiva íntima sin que exista un vínculo familiar». Consciente de la dificultad de controlar el movimiento de la población durante la Navidad, y más teniendo en cuenta la discrecionalidad con la que se puede interpretar el término 'allegado', Illa ha anunciado que el Gobierno prepara «controles aleatorios» para que se cumplan las normas, pero también ha admitido que «no se puede poner un policia en cada casa». «La gran arma que tiene la sociedad española es la concienciación demostrada estos meses», ha aseverado.

Illa ha reiterado que la mitad de la población estará vacunada contra el coronavirus antes del verano y ha garantizado la seguridad de las vacunas, «avaladas por el marco regulatorio europeo, que es muy riguroso». «No se ha sacrificado ni un milímetro de seguridad», ha reiterado. Para convencer al 55% de los españoles que, según la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), se muestra reticente a inmunizarse, Illa ha dicho que el Gobierno va a contar «la verdad» de las vacunas. «Diremos que las vacunas ya han salvado vidas y que esta vacuna también va a salvar vidas», ha subrayado Illa, que ha apelado a todos los profesionales para que se vacunen y para que colaboren en la concienciación de los ciudadanos.

El ministro también ha pedido este lunes «prudencia» sobre los tests de anticuerpos de autodiagnóstico que se van a comenzar a vender esta semana en las farmacias y que permitirán que cada ciudadano se haga a sí mismo la prueba del coronavirus. Estos tests, ha subrayado Illa, vienen avalados por la Unión Europea, pero el ministro ha destacado que «no son un pasaporte absoluto de seguridad, sino una foto del momento». «Vamos a trabajar en protocolarizar su utilización», ha agregado. La directora general de Salud Pública, Pilar Aparicio, ha explicado que quien se realice un test de autodiagnóstico con resultado positivo deberá confirmarlo con una prueba PCR en un centro de salud.