El Hospital de Burgos se queda sin vacunas de la gripe para su personal

Durante la campaña de la gripe no es extraño que, en momentos puntuales o en algunos centros sanitarios, se tenga que paralizar la vacunación por falta de dosis fruto de problemas de abastecimiento o simplemente de una provisión inexacta por parte de los centros. Esta sería la razón que explicaría la falta de vacunas estos días en el HUBU, una semana después de haberse generalizado la campaña de la gripe 2020, que pretende ser mucho más exahustiva que en años anteriores.

La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha insistido en que «no va a haber falta de vacunas» aunque se aumente este año el público objetivo, a fin de tratar de evitar que la gripe sume una segunda pandemia a la covid-19. Eso sí, ha reconocido que se ha producido una «demanda importante, elevada» de vacunas, también en el ámbito sanitario, que es un colectivo más reticente habitualmente, como los propios profesionales reconocen.

Casado ha recordado que las dosis van llegando de manera escalonada, por cuestión también de suministro, pero «hay vacunas para todos». «Calma y tranquilidad», ha afirmado. No es necesario acudir estos primeros días a vacunarse, precisamente para evitar situaciones de desabastecimiento innecesario, pues la campaña de la gripe se va a extender todo el tiempo que sea necesario y nadie se va a quedar sin vacunar.

Las campañas habituales se desarrollan entre octubre y noviembre, y se cubren sin problemas las dos olas de la gripe: finales de diciembre y febrero y marzo. Este año se han adelantado las vacunaciones, se ha ampliado el público objetivo pero también el número de dosis. «No hay una urgencia para ponerse la vacuna», ha afirmado Casado, pidiendo que se dé también priorida a los grupos de riesgo.