Enfermería reclama test rápidos de Covid-19 para controlar los contagios en hospitales y las residencias de Burgos

La gestión de esta crisis sanitaria está siendo «pésima», afirma Silvia López, secretaria del sindicato de enfermería SATSE. El Hospital Universitario de Bugos (HUBU) está saturado, ampliando instalaciones para los afectados por Covid-19 pues de la UCI han pasado a la unidad de reanimación postanestética y del bloque H lo han hecho al bloque B, mientras se derivan pacientes al San Juan de Dios y Recoletas.

En Miranda de Ebro, la situación parece que está más contenida pero en Aranda de Duero se está desbordando y, de hecho, se ha montado ya un hospital de campaña en el recinto ferial. Y la situación no es mucho mejor en las residencias de mayores y centros de personas con discapacidad donde, con los datos facilitados el miércoles, se cuenta con más de 300 personas en aislamiento y 68 confirmados (más 10 fallecidos, vinculados al Covid-19).

Y mientras, los sanitarios siguen expuestos a los contagios y a contagiar, afirma López, pues no se cuenta con suficientes equipos de protección individuales (EPI's). En las residencias saben a ciencia cierta que se están utilizando, y con muchas limitaciones están funcionando en los hospitales de Burgos, Miranda y Aranda, que están probando también procesos de desinfección y esterilización.

Las críticas de SATSE las comparten otros sindicatos, como CC.OO, que afirma que están viendo problemas de acceso a los EPI's en la UCI, el área de reanimación, las Urgencias y las plantas de hospitalización de Covid-19 en el HUBU. También en Atención Primaria y en el Punto de Atención Continuada del Divino Valles. «Tienen que trabajar largas jornadas con el mismo equipo de protección, como medida de economización de recursos, sin quitárselo y sin descanso».

De ahí que SATSE siga presionando para exigir a las administraciones, a quien competa, el envío inmediato de EPI's suficientes para proteger a los sanitarios. También, que se realicen test rápidos. «Debe ser una prioridad», insiste, para controlar qué profesional está contagiado y tomar las medidas oportunas, evitando nuevos contagios. Y lo mismo para los pacientes.

De ahí que SATSE haya remitido cartas a las gerencias del Hospital Universitario de Burgos, del Santiago Apóstol de Miranda y del Santos Reyes de Aranda para reclamar esos test masivos a profesionales, además de los EPI's. También se han dirigido a Atención Primaria, a la Diputación de Burgos y a la Gerencia de Servicios Sociales, para las residencias de mayores y centros de personas con discapacidad.

Sivlia López afirma que la situación en las residencias también es muy crítica y, por unas cosas y otras, el estado de ánimo de los enfermeros no es bueno. «Nos afecta porque no somos de piedra», afirma, ya que están formados para atender mayores y enfermos, pero no para hacerlo con carencia de recursos, como ocurre ahora, que hace todo el trabajo diario más complicado.

Desde SATSE también han reclamado a la Junta de Catilla y León información exacta sobre el número de profesionales sanitarios contagiados y en aislamiento, un dato que no acaban de dar y que es fundamental para saber el volúmen de sanitarios afectados y con cuánta gente se cuenta en las bolsas de empleo.

Mientras, en Diputación, Lorenzo Rodríguez reconoce que no se están haciendo test rápido, pero porque no cuentan con los recursos para ello y se han solicitado a la Junta de Castilla y León. Por lo que se refire a los equipos de protección, asegura que «se tienen suficientes» aunque siguen buscando nuevos sumistros. Insiste en que cuentan con mascarillas y guantes y que se ha contactado con la Universidad de Burgos para las pantallas de protección.