El brote en la residencia de Oña, cuya titularidad pertenece a la Diputación de Burgos, continúa activo a pesar de que se decretó en la segunda semana de agosto. Las últimas PCR realizadas a los usuarios (completadas este martes) han desvelado que trece residentes continúan contagiados. «Aunque ha pasado ya el tiempo, siguen positivizando y se les mantiene aislados», apunta la diputada de Acción Social, Inmaculada Sierra.
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Estos trece positivos forman parte de los 19 que han sido afectados por el brote de covid en la residencia de Oña. Unos usuarios que se han encontrado «bien» y que no han mostrado sintomatología o, en su caso, ha sido «muy leve».
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El brote en la residencia, con más de 200 usuarios actualmente en sus instalaciones, ha afectado a una única planta con 50 residentes. Aún se desconoce el origen del foco, pues desde la institución provincial se descartan las visitas de familiares al ser el primer contagiado una usuaria sin familiares cercanos.
Asimismo, todos los usuarios del centro y los trabajadores se han sometido a un cribado para controlar el brote.
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