De Oña a Marruecos para recorrer el desierto en un Fiat Panda

Se trata de David Arteta y Alejandro Martínez, conocidos en la villa con los apodos de 'Koko' y 'Fono', quienes comenzaron a perjeñar su participación en el Panda Raid como se toman las grandes decisiones: entre cervezas.

Así lo reconoce el propio 'Fono', quien explica que ambos siempre han sido «aventureros», aunque habitualmente, sus aventuras son sobre dos ruedas. Y en una de esas escapadas en bici durante un fin de semana, llegó la propuesta. «Oye, ¿y si participamos en el Panda Raid?», le dijo uno al otro. «Dale», respondió el otro al uno.

Dicho y hecho. A partir de ahí, comenzaron a buscar vehículo y acabaron comprando uno en León hace unos meses. «Es de 1992» y, como todo buen Fiat Panda, es un coche «sencillo», «fiable» y con tracción 4x4, lo que lo convierte en un gran candidato para atravesar el desierto, aunque a priori no lo parezca. «Es un coche con una mecánica muy sencilla y los repuestos se encuentran con facilidad», explica 'Fono'.

Esa circunstancia, sumada al aura especial que rodea a un modelo mítico como el Fiat Panda (o el Seat Marbella, que para el caso, es lo mismo), es uno de los leitmotiv de la Panda Raid, de la que 'Fono' ya había oído hablar tiempo atrás. «Hace años me enteré de su existencia y me dije a mi mismo que me encantaría probar la aventura. Y mira tú», reconoce entre risas.

Ahora mismo, el coche «está en el taller» siendo revisado y preparado específicamente para la aventura con nuevos elementos de seguridad o asientos nuevos, algo «fundamental» para garantizar la comodidad de un coche con un habitáculo tan pequeño.

Todo ello con la vista puesta en el próximo 1 de marzo. Entonces arrancará una prueba de siete días en la que los participantes -se esperan más de 300- tendrán que ingeniárselas para recorrer alrededor de 3.000 kilómetros de arena y montaña a la vieja usanza. Esto es, sin GPS ni wifi, sólo con la intuición, una brújula y el libro de ruta.

Evidentemente, la organización garantiza la seguridad de todos los participantes y atiende posibles accidentes, pero todo lo demás depende de los aventureros, en cuyos macutos deberán meter incluso la tienda de campaña para dormir en el desierto. Casi nada.

En este sentido, 'Fono' reconoce que la aventura no sale barata. Ni mucho menos. Por eso han comenzado a llamar a las puertas de amigos y conocidos en busca de patrocinios que les permitan reducir las facturas que ya han comenzado a amontonarse entre el coche, los arreglos, los seguros, la comida o los repuestos. A mayores, también han abierto un perfil en redes sociales en el que van contando los preparativos de una aventura que se antoja muy interesante.