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Muy molestos están los cuidadores técnicos de servicios asistenciales con el nuevo convenio colectivo de Personal Laboral de la Junta, que «degrada» la profesión al reducir los requisitos académicos. Y en especial ese malestar se dirige a los sindicatos, que «no han defendido los intereses ... de los trabajadores», apuntan los afectados en Burgos.
El convenio, que se ha firmado este lunes, se ha gestionado con mucho «oscurantismo». Los cuidadores técnicos de servicios asistenciales de Burgos, un centenar entre el Centro de Atención a Personas con Discapacidad Psíquica y el Centro Ocupacional El Cid, aseguran que los sindicatos no les han informado sobre el nuevo documento.
Cuando ya se había firmado el preacuerdo, allá por marzo, se enteraron del contenido y de los cambios que afectan a sus puestos. En concreto, se pasa de exigir una titulación de Bachillerato o formación profesional de nivel 2 a exigir una formación profesional de nivel 1, lo que supone «una degradación» de la categoría.
«No nos cuadran los cambios», explican desde Burgos, y creen que van a tener importantes consecuencias, tanto en la carrera profesional de los cuidadores como en la atención que se prestan a los usuarios. Para empezar, al cambiar los requisitos académicos se cierran las opciones de traslados y movilidad, denuncian.
Luego, se les asimilarán funciones que no les van a corresponder como cuidadores técnicos de servicios asistenciales. A esto se suma que les han unido a los TCAE, técnicos en cuidados auxiliares de enfermería, de modo que pasan a ser todos técnicos de atención directa, cuando unos son asistenciales y otros sanitarios.
El colectivo teme que lo que busca la Junta es disponer de personal más versátil, de modo que estos técnicos de atención directa puedan trabajar tanto en los centros de atención a personas con discapacidad como en las residencias de mayores. Y afirman que la calidad del servicio se va a resentir en el momento en que bajas la formación exigida.
Igualmente, los profesionales aseguran que los cambios suponen un trato «discriminatorio» para los usuarios. Las personas con discapacidad están atendidas hasta los 18 años por ayudantes técnicos educativos, a los que sí se les exige un FP de nivel dos, pero en cuanto superan la mayoría de edad, para la Junta, ya no es «necesario» ese nivel de formación.
Por todo ello, los cuidadores técnicos de servicios asistenciales han estado durante los últimos meses protestando en la calle, reclamando y registrando escritos en la Junta. Todo sin éxito pues los sindicatos han hecho «oídos sordos» a sus peticiones y, con los votos de CCOO, UGT y CGT (CSIF no lo ha apoyado), han aprobado el nuevo convenio.
A partir de ahora el colectivo seguirá luchando. Denunciará el convenio colectivo, que se acaba de firmar, y, de momento, ya ha exigido con firmas que se revoque a los representantes de los sindicatos porque «no han defendido los intereses» de los trabajadores. El convenio es «bastante desfavorable» pues «degrada a los cuidadores técnicos, insisten.
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