Secciones
Servicios
Destacamos
J. M. L.
Miércoles, 1 de enero 2025
La tercera edición de la «Big Fucking Party», que comenzó en la pasada Nochevieja junto al aeropuerto de Ciudad Real, llegará a su fin el día de Reyes, tal y como ocurrió en las dos ediciones anteriores de La Peza (Granada) y Fuente Álamo (Murcia). Así lo aseguran los participantes en esta 'rave' no autorizada que sus organizadores han convocado a través de las redes sociales y grupos de Whatsapp indicando en la tarde de Nochevieja el lugar exacto de esta macrofiesta de música electrónica: un polígono industrial perteneciente al aeropuerto de Ciudad Real, una infraestructura que lleva años sin acoger vuelos comerciales y que hoy sólo se dedica a la carga y descarga de mercancías, mantenimiento de aeronaves y vuelos privados.
La «rave» manchega está transcurriendo sin incidentes y bajo unas condiciones climáticas extremas con temperaturas mínimas de dos grados bajo cero y densas nieblas que se disipan al mediodía. Los cerca de 5.000 participantes en este evento llegados en 1.500 vehículos duermen pocas horas y lo hacen dentro de coches, autocaravanas, furgonetas y camiones y también en tiendas de campaña arropados por mantas, edredones, sacos de dormir y todo lo que sirva para aumentar la temperatura corporal. «Estaremos aquí hasta que el cuerpo aguante», dicen los que han acudido a la «Big Fucking Party» -la mayoría jóvenes y muchos acompañados por sus mascotas- desde toda España y otros países como Alemania, Francia o Países Bajos.
Aunque esta 'rave' no ha registrado incidentes y sus participantes afirman que es una fiesta pacífica y alternativa a los cotillones de Nochevieja organizados por el sector hostelero, sí provocó problemas de tráfico en sus primeras horas con la autovía que une Ciudad Real con Puertollano (Ciudad Real) colapsada. «No ha habido problemas de seguridad ciudadana y se han implementado controles en las vías de acceso para asegurar el tráfico fluido y evitar cualquier accidente», explica el subdelegado del Gobierno de España en Ciudad Real, David Broceño. Para ello, la Guardia Civil y la Policía Nacional –incluso con helicópteros- junto a las policías locales de Ciudad Real y Puertollano han intensificado las labores de vigilancia y control.
El desalojo de esta macrofiesta ilegal se descarta, al igual que ocurrió en las celebradas en Granada y Murcia en los dos últimos años, ya que una acción policial en este polígono podría acarrear males mayores. Por el contrario, la estrategia es desarrollar una «operación jaula», es decir, permitir la entrada de vehículos pero no su salida y vuelta a entrar. De esta forma, a medida que se agoten sus bebidas y alimentos se espera que abandonen poco a poco la 'rave'. No obstante, junto a una carpa de circo y los escenarios montados y dotados de grupos electrógenos se han instalado tenderetes que venden bebida y comida rápida como pizzas, kebabs y bocadillos y que en cuestión de un par de días también se acabarán.
Esta «Nochevieja infinita» que acabará el día de Reyes no parece molestar a los vecinos más próximos, los que residen en la capital manchega y en pueblos como Ballesteros de Calatrava, Poblete, Villar del Pozo o Corral de Calatrava.
Los ecos de la música electrónica llegan a estos municipios de forma leve y sus vecinos prefieren tomárselo con humor: «Por la mañana podrían varear los olivos, porque estamos con la cosecha de aceituna, y por la tarde ir a la fiesta», sugieren algunos.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La bodega del siglo XIV que elabora vino de 20 años y el primer vermut de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.