Borrar
Fotolia
El libro de familia desaparece

El libro de familia desaparece

A partir del 30 de abril el Registro Civil dejará de expedir el documento en formato físico, pero los existentes siguen teniendo validez

R. C.

Jueves, 29 de abril 2021, 13:25

El libro de familia tiene sus días contados... Al menos el que tienen en su casa millones de familias porque un día decidieron contraer matrimonio, tener hijos, o por fallecimiento de un familiar. A partir de mañana, 30 de abril, los registros españoles dejarán de ... expedir en formato físico este documento para dar paso a su versión digital. Los expedidos hasta ahora no pierden su validez, se pueden seguir utilizando con normalidad, pero ya no se entregarán más en formato físico. La tecnología vuelve a ganar terreno sobre el papel.

El libro de familia se rige actualmente bajo la ley que data del 8 de junio de 1957, «una ley muy antigua que está vigente parcialmente -apunta el abogado Adrián Sánchez Pedrero-, junto a la Ley 20/2011, de 21 de julio, del Registro Civil. En esta última normativa ya se planteó la modificación del formato del Libro de Familia y en su día se produjeron algunas manifestaciones en contra por parte de funcionarios, al considerar que la intención era la privatización de dicha gestión. Después de años de convivencia de ambas leyes, mañana entrará en vigor en su totalidad la Ley 20/2011, de 21 de julio, con su publicación en el Boletín Oficial del Estado.

Delia Rodríguez, socia directora de Vestalia Abogados de Familia, añade que, aunque la vigente Ley del Registro Civil, de 8 de junio de 1957, ha demostrado ser capaz de adaptarse a lo largo de décadas, no es menos cierto que el protagonismo de la tecnología en nuestro día a día evidencia la necesidad de una profunda transformación normativa adaptada a la realidad social y familiar. «La reforma cambiará de arriba abajo la concepción de nuestro registro actual, facilitando al ciudadano la consulta y acceso, desde cualquier lugar, a este tipo de información. En este sentido -matiza-, la ley suprime el tradicional sistema de división del Registro Civil en secciones -nacimientos, matrimonios, defunciones, tutelas y representaciones legales- y crea un registro individual para cada persona a la que, desde la primera inscripción que se practique, se le asigna un código personal».

Los libros expedidos hasta ahora no pierden su validez y se podrán seguir utilizando con normalidad

Explica Rodríguez que, dentro del ámbito del Derecho de Familia, cuando los clientes toman la decisión de separarse o divorciarse se enfrentan a una fase de recopilación de documentos que es ardua y agotadora, especialmente si piensan acudir a un procedimiento judicial contencioso. La Ley de Enjuiciamiento Civil recoge en su artículo 770 que las demandas de separación y divorcio deberán acompañarse de la certificación de la inscripción del matrimonio y, en su caso, de la inscripción de nacimiento de los hijos en el Registro Civil, entre otros muchos documentos en los que los clientes fundamentan sus peticiones.

«Simplemente el hecho de recabar el certificado de matrimonio y de nacimiento de los hijos en común (que deben tener menos de tres meses desde su fecha de expedición) representa un trámite tedioso y muy poco práctico que llevaba del orden de entre dos y tres semanas, incluso más, afirma Delia Rodríguez. Si además se trata de un matrimonio extranjero inscrito en España, estas gestiones podrían, según qué casos, dar más de un dolor de cabeza a los clientes».

Documento imprescindible

El Libro de Familia es uno de los documentos que se solicitan siempre al iniciar un procedimiento judicial de familia, debiendo aportarse una copia. Para esta abogada, se trata de una buena noticia en aquellos casos en los que las parejas decidan romper su matrimonio. Un indicativo en muchos hogares de que las relaciones de pareja no van bien es que el libro de familia desaparece, puesto que es un documento imprescindible para poner una demanda contra el cónyuge, junto a los certificados de nacimiento de los hijos, en el caso de haberlos, y de matrimonio.

«Muchas personas optan por guardárselo y esconderlo de la pareja en un proceso de separación, para que no tenga posibilidad la otra parte de presentarlo ante los juzgados. Esta nueva medida -prosigue la letrada- facilitará la tramitación del duplicado del documento en caso de necesitarse en dichos trámites, puesto que hasta ahora era un proceso muy complicado el que había que realizar para conseguirlo cuando desaparecía». La sustitución de los libros físicos del registro por una base de datos permitirá a los ciudadanos realizar trámites en cualquier oficina del país, obtener certificaciones telemáticas y, además, en todas las lenguas oficiales.

Menos discusiones

La Asociación Española de Abogados de Familia (AEAFA) considera positiva la incorporación del Libro de Familia electrónico a partir de este viernes, ya que se reducirán los motivos de discusión de las parejas y se facilitarán los trámites burocráticos.

«Tras un divorcio, el Libro de Familia se convertía en motivo de controversia porque las parejas se peleaban por tener el original. Con el nuevo formato, se podrá tener acceso a toda la información sin recurrir al Registro Civil para pedir un duplicado, un trámite que en ocasiones no resultaba sencillo», explica la presidenta de la AEAFA, María Dolores Lozano.

Asimismo, el Libro de Familia tradicional generaba inconvenientes en determinadas gestiones, sobre todo de índole internacional, ya que los ciudadanos no suelen actualizarlo e incorporar los cambios que se producen en la familia, como son las defunciones o los divorcios.

Este documento es esencial para cursar el D.N.I o pasaporte a un menor de edad, tramitar la baja maternal, dar de alta a los hijos en la cartilla de la Seguridad Social, empadronarse en el lugar de la residencia, solicitar plaza en una guardería o en un colegio público o concertado, pedir el paro o cobrar el subsidio cuando este se termina, firmar un contrato laboral o viajar con un bebé entre otros.

Este documento tradicional, que expedía el Registro Civil y que existía en la práctica totalidad de los hogares españoles data desde más de un siglo y acreditaba las relaciones de parentesco en el núcleo familiar, entre padres e hijos y entre cónyuges. Una base documental extraordinaria que muestra los importantes cambios de la sociedad española durante todo este tiempo.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

burgosconecta El libro de familia desaparece