Secciones
Servicios
Destacamos
La enseñanza dual, la que forma al tiempo en el aula y en la empresa, ha tardado en llegar a la universidad española, pero su extensión por los campus crece año tras año y con rapidez. Esta fórmula educativa de éxito, que en la última década ha colonizado la FP, comienza a abrirse paso también en las universidades, según certifica el primer estudio monográfico realizado en España por la Fundación Bertelsmann, la Confederación de Consejos Sociales y la Universidad de Mondragón, el centro pionero en esta apuesta académica.
Casi cuatro de cada diez universidades españolas (el 37%) ya cuentan con alguna titulación dual, bien sea de grado o de máster o de ambas. En muy pocos años ha pasado de ser un fenómeno marginal a una realidad, con 72 grados y 51 máster dualizados en campus de once autonomías. Pero en breve esta oferta se multiplicará, porque la mitad de las universidades encuestadas, entre ellas prácticamente todas las públicas, o tienen ya titulaciones duales en marcha o van a tenerlas pronto.
Este tipo de estudios, como ocurre también en la FP, no son simples prácticas curriculares, como las que algunas carreras ya tenían en sus últimos cursos. Son muchas más horas de formación en el puesto de trabajo (donde los alumnos tienen tutores), los empresas participan en la elaboración del plan de estudios y el alumno cobra una remuneración por obligación legal.
El reparto actual de la oferta dual es aún muy irregular. La mitad de todos los títulos españoles los imparten los centros del País Vasco, con la Universidad de Mondragón a la cabeza. El segundo gran foco es Andalucía, en la que la mitad de sus campus tienen ya algún título dual, pero que desde hace años concentra su oferta en la Universidad de Almería, con 19 grados y 12 máster de este tipo. La tercera zona pionera fue Cataluña, y en concreto la Universidad de Lérida.
Lo positivo, no obstante, es que el interés por extender la fórmula es generalizado y creciente. Hasta el 85% de las universidades consultadas aspiran a tener estudios duales pronto y los centros de Extremadura, Murcia o La Rioja, hoy sin oferta, tienen en sus objetivos sumarse a esta tendencia académica. Los especialistas creen que ya se ha iniciado un camino sin retorno.
La razón del auge es que los datos existentes indican que se trata de una fórmula de éxito allí donde se implanta. Aumenta el diálogo entre empresa y universidad y es, según los expertos, una respuesta ágil y efectiva para incorporar a los campus la demanda de nuevas profesiones y cualificaciones que reclama un mercado laboral en continuo cambio. «La conexión directa de los alumnos con el mundo empresarial hace que estos se encuentren más capacitados para enfrentarse a los desafíos de las transformaciones sociales, tecnológicas y económicas en el mercado laboral», resumen los autores del informe.
Este enfoque formativo se traduce en una alta empleabilidad juvenil en los lugares o países donde la fórmula está más desarrollada. El 91% de los titulados duales de los centros de Mondragón logran empleo con rapidez y el caso más documentado es de Alemania, donde el 70% de quienes estudian en forma dual se acaban quedando a trabajar en las propias empresas donde se preparan. La enorme implantación de la modalidad tanto en la FP como en la universidad alemanas explica en parte que la tasa de desempleo entre los jóvenes (de 16 a 29 años) fuese el año pasado de 5,5%, cinco veces más baja que el 26,8% registrado en España.
A día de hoy, no obstante, el diseño dual no solo está muy concentrado en algunos puntos del país sino también en algunas áreas de conocimiento. La apuesta más decidida se ha dado en las ingenierías, que acaparan el 64% de los títulos dualizados en marcha. Destacan las ramas industriales y mecánicas, con el 27%, seguidas por las informáticas (18%) y las electrónicas y de comunicaciones, con el 14%. Otros campos que comienzan a apostar por la dualización son las titulaciones en ciencias económicas y de dirección de empresas, la sociología, el periodismo o el turismo.
Los promotores de este estudio consideran que para que la universidad española pueda dar de verdad el salto dual hacen falta tres tipos de medidas. Una mayor coordinación entre los intereses comunes de universidades, empresas y gobiernos, una regulación más flexible de la formación dual y una amplia política de incentivos económicos, como pueden ser deducciones fiscales o en las cotizaciones y subvenciones, para que motivar a las empresas, los centros académicos y los estudiantes.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.