Sin mascarillas en 10 farmacias del centro de Burgos, 7 de ellas ni siquiera pueden apuntar en lista de espera

Gloria Díez

Burgos

Martes, 14 de abril 2020, 14:23 | Actualizado 17:52h.

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«No hay mascarillas» es una de las frases más recurrentes que pueden leerse en las farmacias de la capital desde que estallara la emergencia sanitaria por la COVID-19. En aquellas en las que no aparece este mensaje solo hay que cruzar el umbral para preguntar y la respuesta es la misma: «no nos quedan». Es la situación que presentan las farmacias de Burgos y que ejemplifican diez de las más céntricas. Ninguna de ellas dispone de este material y solo en tres garantizan el suministro, eso sí, previa inscripción en lista de espera.

En una de estas farmacias situadas en la calle Laín Calvo, este martes había 25 personas apuntadas para conseguir una mascarilla en cuanto reciban el pedido. En otras, en concreto siete de las visitadas, ni siquiera disponen de lista de espera porque no pueden garantizar el suministro. «Hay muchísima gente preguntando y no sabemos cuándo ni cuántas nos van a llegar», explican desde un establecimiento del centro. «Cuando lleguen las pondremos a la venta, pero no podemos ni apuntar a la gente porque son demasiados», confiesa.

Este es uno más de los casos que viven en muchas farmacias, una avalancha de ciudadanos tratando de conseguir esta protección y un suministro limitado. «Nosotros tenemos lista de espera, pero estamos dolidos por las informaciones que han salido afirmando que inflamos los precios porque no es verdad. Cobramos lo que nos marcan y algunos productos excesivamente caros ni los traemos a la venta para evitarnos esos comentarios», declaran desde una farmacia de la plaza Vega.

Los geles hidroalcohólicos para desinfectar las manos y los guantes de protección son elementos más asequibles, pero también se agotan en estos establecimientos. «La gente quiere protegerse, es normal», manifiestan desde otra botica, que no ha puesto lista de espera para conseguir mascarillas porque, lamentan, «se agotan muy rápido y llegan a cuentagotas las cajas con el género, no sabemos si en la próxima remesa habrá para toda la gente que las demanda, por eso no hacemos lista de espera», concluyen.