Secciones
Servicios
Destacamos
J.V. Muñoz-Lacuna
Toledo
Miércoles, 8 de abril 2020, 13:18
Los efectos de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus no sólo se limitan al ser humano. También las ovejas españolas pueden sufrir sus consecuencias por la falta de mano de obra especializada para el secular trabajo del esquileo. Es en abril cuando se ... inicia esta campaña, que dura unos tres meses, y desde hace años es personal especializado procedente de Polonia, Rusia y Uruguay el que se encarga de esta tarea ya que los esquiladores españoles han ido jubilándose progresivamente y los jóvenes del campo no han tomado el relevo.
Aunque un real decreto del Gobierno publicado a finales de marzo considera el esquilado de las ovejas como «labor esencial» dentro del estado de alarma para garantizar el bienestar de los animales, el problema este año es el cierre de las fronteras. «Las cuadrillas nacionales tendrán que asumir este trabajo pero con el criterio de proximidad por la limitación de movimiento», lamenta Pablo Punzón, ganadero de Consuegra (Toledo).
Según datos de la Interprofesional del Ovino-Caprino (Interovic), en España hay unos 13 millones de ovejas, la mitad de las cuales son esquiladas por alrededor de 500 trabajadores especializados procedentes de otros países, y cerca del 60% podrían quedarse este año sin que se les corte la lana.
«Esto podría provocar importantes alteraciones sanitarias en la cabaña ganadera y mermar el bienestar de los animales», apunta Raúl Muñiz, presidente de Interovic. Y es que si a las ovejas no se les esquila antes de que llegue el verano sufrirán estrés térmico y se incrementará el riesgo de sufrir enfermedades causadas por ectoparásitos.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La proteína clave para la pérdida de grasa
El Comercio
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.