Borrar
Uno de los astronautas de la Estación Espacial trabaja en uno de los experimentos. efe
Más de 3.000 experimentos en ingravidez en la Estación Espacial

Más de 3.000 experimentos en ingravidez en la Estación Espacial

Sus dos décadas de investigación impulsan la conquista del espacio y aportan avances contra infecciones, osteoporosis o purificación de agua

colpisa / afp

París

Domingo, 2 de mayo 2021, 22:13

La Estación Espacial Internacional (ISS) es un laboratorio científico puntero prácticamente desde su construcción en 1998. En sus instalaciones se han realizado más de 3.000 experimentos en unas condiciones únicas de ingravidez que han aportado conocimientos clave para relanzar la conquista del espacio, ... aunque también importantes avances en la lucha contra las enfermedades y para mejorar la vida en la Tierra.

Actualmente la estación funciona «al 100% de sus capacidades», afirma Sébastien Vincent-Bonnieu, que coordina los experimentos científicos de la Agencia Espacial Europea (ESA). El interior de la ISS, que se halla a 400 kilómetros de altitud, tiene un tamaño similar a un campo de fútbol y está dividido en pequeños espacios, como una colmena.

Los 'inquilinos' de la base orbital, cuyo cierre está previsto para 2028, realizan experimentos pilotados por investigadores desde la Tierra y les sirven de «conejillos de Indias». La nueva tripulación lleva en su lista de tareas un centenar de experimentos, como el 'Cerebral Ageing', para estudiar el envejecimiento de las células nerviosas cerebrales; el 'Telemaque', que consiste en una pinza acústica para manipular objetos sin contacto, o el 'Eco Pack', una nueva generación de envoltorios. Los astronautas se relevan en las tareas de laboratorio. Los experimentos «se conciben a largo plazo, independientemente de las misiones», según Sébastien Barde, responsable de Cadmos, división especializada del Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES) galo.

A bordo de la ISS, el organismo humano, tan bien adaptado a la gravedad, es agitado como en una batidora y la degradación que se observa en los huesos y las arterias se asimila al envejecimiento celular. Con la diferencia de que, al regresar a la Tierra, el fenómeno es reversible.

«Lo interesante es estudiar cómo trabaja el cuerpo para volver al equilibrio, ofreciendo eventuales pistas para el desarrollo de tratamientos antienvejecimiento», según Barde. «Es un aprendizaje permanente. Así como al principio era necesario llevar material médico al espacio, ahora es el espacio el que nos aporta recursos de este tipo puesto que la ingravidez nos brinda una mayor comprensión de las enfermedades», subraya a AFP el presidente saliente del CNES, Jean-Yves Le Gall.

Proyectos «prometedores»

Avances contra la osteoporosis y la salmonelosis o nuevos sistemas de purificación del agua son algunos éxitos. En estas dos décadas «hubo hallazgos importantes» a bordo de la ISS, según el historiador estadounidense Robert Pearlman, que cita otros proyectos «prometedores», como la impresión 3D de órganos.

Algunas voces críticas, no obstante, rechazan el alto coste de las investigaciones, que le sirven a la NASA para reducir gastos de mantenimiento y concentrar recursos en la exploración espacial más lejana. «Desde la estación soviética MIR, ya sabemos todo lo que hay que saber sobre los efectos de la microgravedad en el cuerpo», criticó en 2019 el exastronauta francés Patrick Baudry, calificando la ISS de «patraña».

Pese a todo, para muchos científicos, sean del área médica, de ciencias de la materia o de otros ámbitos de conocimiento, la base orbital es «el único medio» de llevar a cabo determinadas investigaciones, puesto que estas requieren superar la gravedad, según Barde. Siempre habrá una comunidad ávida de estudiar los fenómenos sin gravedad, coincide Sébastien Vincent-Bonnieu, que constata un interés «creciente» por los experimentos en órbita, ya sea en la ISS o en otros lugares, como en la futura estación orbital lunar 'Gateway'.

Tareas de rescate de los astronautas tras amerizar la nave de SpaceX en el Golfo de México. reuters

Astronautas de la ISS regresan en una nave privada de SpaceX

La cápsula Crew Dragon de la compañía SpaceX, que transportaba a cuatro astronautas de vuelta a la Tierra, amerizó en la madrugada de este domingo frente a las costas de Florida, tras una misión de 160 días en el espacio. La cápsula amerizó a las 2:56 en el Golfo de México frente a las costas de Panama City, en el sureste de Estados Unidos, después de un vuelo de seis horas y media desde la Estación Espacial Internacional (ISS), según las imágenes de la agencia estadounidense.

Los equipos del barco Go Navigator recuperaron la cápsula y la izaron a la cubierta media hora después, en el primer amerizaje nocturno de la NASA desde el que realizó la tripulación del Apolo 8 en el Océano Pacífico, el 27 de diciembre de 1968.

El comandante Michael Hopkins fue el primero en salir, seguido poco después por su compatriota estadounidense Victor Glover. Ambos llegaron a la Tierra junto a la estadounidense Shannon Walker y al japonés Soichi Noguchi. «En nombre del Crew-1 y de nuestras familias, solo queremos dar las gracias. Es increíble lo que se puede lograr cuando la gente se une. Estáis cambiando el mundo. Enhorabuena. Es genial estar de vuelta», dijo Hopkins en un tuit de la NASA.

Los cuatro astronautas se convirtieron en noviembre en los primeros de una misión «operativa» en ser transportados a la ISS por la compañía espacial de Elon Musk, que se ha erigido en socio clave de la NASA. Otros dos estadounidenses ya hicieron el viaje de ida y vuelta a bordo de la Crew Dragon en 2020, durante una misión de prueba de dos meses a la estación.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

burgosconecta Más de 3.000 experimentos en ingravidez en la Estación Espacial