Se busca a Patxi. Todo el barrio de La Florida en L' Hospitalet de Llobregat (Barcelona) lleva una semana movilizado en busca de este loro gris africano de cola roja que desapareció de su casa el pasado viernes 10 de mayo. Aquel día «hubo un ... incidente en casa que le puso nervioso y le hizo salir al exterior», dice Marga Andrade, hija de la propietaria. «Es un loro que está acostumbrado a volar por casa, incluso con las ventanas abiertas, y solo entraba en la jaula para dormir», añade con la emoción de quien recuerda a un ser querido. «Lleva conviviendo con la familia desde hace 22 años y es uno más en casa» y todos necesitan que vuelva cuanto antes, sobre todo «mi madre Margarita», que es la que más está echando de menos al animal que ha sido su compañero desde hace dos décadas.
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Patxi llegó a la familia Andrade hace 21 años «porque unos amigos no consiguieron que se adaptarse y nos lo quedamos», recuerda Marga. Patxi, que lleva chip, pero no anilla, ha cautivado el corazón de esta familia porque es «muy inteligente, muy sociable e imita muy bien las voces». «Sobre todo la de mi padre, que ya está fallecido», cuenta Marga que recuerda emocionada que es «un charlatán» y que dice «guapo», «dame agua» y llama por el nombre a toda la familia (Carlos, Marga o mamá).
La que más echa de menos a Patxi es Margarita, que a sus 80 años pasa mucho tiempo con el loro y se ha convertido en su compañero día y noche. «Ella es la que está más afectada por la ausencia de Patxi y por eso decidimos movilizarnos», añade su hija. Patxi imita a la perfección la voz del marido de Margarita, y padre de la familia, que falleció durante la pandemia «hasta tal punto que a veces parece que está mi padre en el salón», desvela Marga emocionada.
Por eso, la familia ha decidido ofrecer una recompensa de 1.000 euros a la persona que lo devuelva, porque ellos creen que «lo tiene alguien». «Sospechamos que lo tiene alguna persona que los ha encontrado, porque este tipo de animal puede buscarse la vida para sobrevivir durante 2 o 3 días, pero pasado ese tiempo necesita una alimentación concreta basada en verduras, semillas y fruta», señala Marga. «Sólo queremos recuperar a Patxi y la persona que nos los de no tendrá ninguna represalia». La recompensa se puede ver en los más de 300 carteles con la foto de Patxi, que han pegado en todo lleva un chip. Nos cuentan que L' Hospitalet de Llobregat y en los barrios cercanos.
El domingo la Policía Local llamó a la familia Andradre para decirles que habían encontrado un loro gris africano de cola roja y pensaron que era Patxi, pero al llegar al lugar donde estaba comprobaron que no era «porque era más pequeño, tenía anilla y el chip no era el mismo que el de Patxi», señala con tristeza Marga.
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