Hasta los dos años los niños no deben usar dispositivos con pantallas

Ante los estímulos que ofrecen los programas digitales, los niños sienten «fascinación», en vez de «atención», afirmó L´Ecuyer en el foro Haciéndote Preguntas, organizado por el diario ABC y el grupo educativo CEU. «La atención es una actitud de descubrimiento y de apertura ante la realidad, algo positivo, mientras que la fascinación es una actitud pasiva ante estos estímulos novedosos, frecuentes e intermitentes», explicó la educadora. Así que, ante la exposición de los niños a las tecnologías cada vez más temprana, pidió que no tuvieran «ningún contacto» hasta los dos años.

En la adolescencia, el problema cambia, pero no disminuye. Entre los jóvenes el uso de las tecnologías puede obstaculizar su aprendizaje para relacionarse, resolver problemas y aceptarse a sí mismos fuera del entorno digital. «Es paradójico pensar que alguien que tiene mil amigos en Facebook sienta que no tiene ningún amigo en la vida real», sentenció L´Ecuyer.