Anne Hidalgo, una alcaldesa llena de dudas

¿Y quién es Anne Hidalgo? Su verdadero nombre es Ana María Hidalgo Aleu. Nació el 19 de julio de 1959 en San Fernando (Cádiz) en el seno de una familia republicana. Los Hidalgo emigraron a Francia en 1962 en busca de un futuro español. Ni su padre, electricista, ni su madre, costurera, hablaban francés cuando atravesaron los Pirineos. Ella tenía entonces dos años y su hermana cuatro.

Creció en un barrio popular en las afueras de Lyon. En su casa, se hablaba español. Toda la familia obtuvo la nacionalidad francesa en 1973. Ana, que por entonces tenía 14 años, pasó a llamarse oficialmente Anne en Francia.

Aunque soñaba de pequeña con ser bailarina o periodista, acabó estudiando Derecho. Se licenció en Ciencias Sociales y del Trabajo. Y obtuvo un diploma de estudios avanzados (DEA) en derecho social y sindical. Antes de dedicarse a la política, ganó unas oposiciones y fue una de las inspectoras de trabajo más jóvenes de Francia. Hidalgo se afilió al Partido Socialista francés en 1994 y tuvo su primera experiencia en la política en 1997, como consejera de la ministra de Empleo, Martine Aubry.

En el gabinete ministerial conoció al que sería su segundo marido, Jean-Marc Germain, con el que se casó en 2004. Hidalgo, madre de tres hijos de dos matrimonios distintos, tiene ya dos nietos. La política hispanofrancesa, de 62 años, separa completamente su vida política de la familiar.

Hidalgo, gaditana de nacimiento y parisina de adopción, fue nombrada en 2001 primera teniente alcalde del Ayuntamiento de París cuando el socialista Bertrand Delanoë estaba al frente del consistorio. Y después se presentó en 2014 como candidata a su sucesión cuando éste se retiró.

«Podría haber sido ministra, me lo han propuesto. Mi ambición está en otro sitio: soy candidata para ser la próxima alcaldesa de París. A diferencia de algunos, no considero esta función como un trampolín hacia otras metas. Para mí es un compromiso, exigente y exclusivo», escribía entonces Hidalgo en su libro 'Mi combate por París' (Flammarion).

En 2014 se convirtió en la primera alcaldesa de la historia de París. Sus siete años en el consistorio no han sido un camino de rosas. Le ha tocado lidiar con los atentados terroristas del 13 de noviembre de 2015, las manifestaciones de los chalecos amarillos, el incendio de la catedral de Notre Dame, la huelga de los transportes públicos y la pandemia de covid.

Sus detractores, que tiene muchos en la capital, la apodan «nuestro drama de París», haciendo un juego de palabras en francés con Notre Dame de París. Consideran que el balance de su gestión es desastroso, critican la suciedad de las calles, el aumento de los mendigos y la ven como una enemiga de los coches.

Hidalgo, que aúna socialismo y ecología, ha prometido, entre otras cosas, que durante este mandato peatonalizará el centro de París y construirá más carriles-bici con el fin de que la capital francesa sea una ciudad «100% bicicleta».

Está convencida de que los franceses no quieren que se repita en 2022 el duelo, anunciado desde hace meses por todas las encuestas, entre el presidente saliente Emmanuel Macron y la líder de extrema derecha Marine Le Pen en la segunda vuelta de las presidenciales. Los dos ya se enfrentaron en 2017.

«Quiero ayudar a construir otra oferta política», se limitó a decir cuando en una entrevista con FranceInfo le preguntaron si el año que viene habrá papeletas con su nombre en las presidenciales.

La alcaldesa de París, que es amiga del presidente español Pedro Sánchez, coquetea desde hace meses con presentarse a los comicios, pero todavía no ha anunciado oficialmente su candidatura. El problema es que, a diez meses de la cita electoral, a Hidalgo no le sonríen los sondeos.

Según una encuesta reciente de Harris Interactive, Le Pen sería la candidata más votada en la primera vuelta con el 27% de los votos, seguida de Macron con el 26% y el conservador Xavier Bertrand con el 13%.

Los tres principales candidatos de izquierda no levantan, de momento, grandes pasiones entre el electorado. Jean-Luc Mélenchon, líder de La Francia Insumisa (el equivalente de Podemos en Francia), obtendría el 11% en la primera vuelta; Anne Hidalgo, el 7%; y el ecologista Yannick Jadot, el 6%.

Solo los dos candidatos más votados se clasifican para la segunda vuelta. Hidalgo es consciente de que sólo si todas las fuerzas de izquierda se unen podrían lograr pasar a la segunda vuelta. Si Macron y Le Pen pasan, como se espera, a la segunda vuelta, el presidente saliente lograría el 53% de los votos frente al 47% de la líder ultraderechista, según esa misma encuesta.

Si finalmente decide no presentarse a las elecciones presidenciales de 2022, a Hidalgo no le faltarán desafíos. La edil socialista estará al mando de la capital durante la celebración de los Juegos Olímpicos de París en 2024. Todos los ojos estarán puestos en la ciudad de la luz y en ella. Si los Juegos Olímpicos son un éxito, quizá podría jugar esa carta en la carrera al Elíseo de 2027.