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Bruno Savignani ya está en Burgos. El nuevo entrenador del Silbö San Pablo ha sido presentado hoy en sociedad en una comparecencia en la que ha asumido e incluso valorado la presión del cargo. Sabe dónde ha recalado y la exigencia que tiene sobre la mesa. Una exigencia que, lejos de amedrentar, ha de suponer un incentivo, según ha manifestado.
«Aquí hay la exigencia más alta de la Primera FEB y para mí está bien que sea así. Si quieres un reto grande, hay que tener presión y hay que saber manejarla. Quien quiere competir a alto nivel tiene que saber que va a haber presión», ha asegurado al tiempo que agradecía al presidente del club, Félix Sancho, y el director deportivo, Albano Martínez, la confianza depositada sobre él.
En este sentido, el técnico brasileño, que ha sido presentado en las nuevas instalaciones de Recoletas en Virgen del Manzano ha asegurado que no tuvo dudas cuando recibió la llamada del club. «La decisión fue sencilla. Félix, Albano y el club han hecho todo lo posible para que se pudiera concretar y al final aquí estoy, feliz e ilusionado. Agradezco mucho la oportunidad. Como en toda oportunidad, hay que venir con hambre, con ilusiones y yo las tengo. Tengo muy claro lo que tengo que hacer y dónde queremos llegar», ha añadido.
Por su parte, y a la espera de concretar la llegada de «uno o dos jugadores más», Savignani ha afirmado estar muy satisfecho con la plantilla actual. Una plantilla, ha dicho, «muy cualificada» y apta para afrontar «los retos que nos proponemos».
A este respecto, el entrenador brasileño ha hecho hincapié en el desarrollo de su idea de baloncesto, que pasa por construir un equipo «intenso, que defienda fuerte y rebotee duro», teniendo en cuenta que «el 78% de los equipos que ganan la batalla del rebote ganan los partidos». «Tenemos que ser muy fuertes ahí para poder correr el campo y jugar, no voy a decir que totalmente libres, pero que los jugadores se diviertan en cancha. Es importante que ellos se sientan bien», ha señalado.
De momento, el equipo está en construcción y no ha hecho sino empezar a preparar la temporada. Una temporada en la que tanto Sancho como Albano confían en lograr el reto del ascenso a la Liga Endesa. Para ello, el club apostó por un «entrenador que ha ido creciendo en los equipos donde ha estado y empatiza con los jugadores y les hace llegar el mensaje». Esa, a juicio de Martínez, es la clave para formar un grupo unido, competitivo y ganador.
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