De pilar importante en el San Pablo Burgos a poner las primeras piedras de la selección española 3x3

Justo antes de la pandemia una llamada de Nacho Coque (coordinador de todos los preparadores físicos de la Federación Española) le puso en la órbita del combinado nacional para liderar los aspectos físicos de algunas de las categorías inferiores. La covid truncó toda posibilidad, pero este verano se han alineado los astros para que Hernández se enfunde el polo de la selección.

Un nuevo paso en su carrera que le lleva este fin de semana hasta Barcelona, donde mantiene una concentración para viajar la próxima semana hasta Israel para buscar la clasificación al Eurobasket. El sueño de los Juegos Olímpicos aún tiene que esperar hasta París 2024, pero Hernández, junto a jugadores veteranos como Javi Vega, Nacho Martín o Sergi Pino, están colocando las primeras piedras. «Es una modalidad que estoy empezando a conocer y que está creciendo en número de clubes en España. Además, hay muchos jugadores que se están sumando. A ver si esta generación, que ha apostado por el 3x3, tienen la suerte de ir a los Eurobaskets, Mundiales o los Juegos Olímpicos», añade el preparador palentino.

Una modalidad que ha descubierto recientemente y que le ha obligado a variar ligeramente los entrenamientos. «Las dimensiones de la pista son diferentes. Es un juego que tiene más desaceleraciones, más acciones de alta intensidad... Además, es muy vistoso y me ha sorprendido gratamente ver los primeros entrenamientos con contacto. El ritmo de juego es frenético, las posesiones de juego cortas, el balón se mueve muy rápido y no hay opción para pensar o para que la táctica tenga una importancia desmedida», describe Hernández, que recupera el castellano como lengua para dirigir las sesiones.

«En el San Pablo hay muchos jugadores que hablan castellano, pero las activaciones o los calentamientos son en inglés. Ahora, con la selección, hay veces que me cuesta encontrar la palabra en castellano. Es una experiencia diferente. Ya me tuve que adaptar cuando estuve con la selección nacional de sordos o cuando estaba en Costa de Marfil (por aquel entonces militaba en el Palencia Baloncesto de LEB Oro). Aun así, son jugadores profesionales y es fácil trabajar con ellos», añade.

Precisamente, ya han pasado cuatro años desde que Daniel Hernández dejara el Palencia Baloncesto para alistarse en el San Pablo. Ese año dio el salto a la ACB y ahora vuelve a subir un escalón en su carrera profesional al entrar en el organigrama de la selección española. «Me queda trabajar para seguir con estas experiencias, mejorar y aprender de lo que estoy viviendo. Ambición, siempre, y con ganas de alcanzar la clasificación o los mejores puestos que se puedan tener, pero siempre con humildad», manifiesta el preparador del San Pablo tras una temporada exitosa.

«Nuestro objetivo tiene que ser consolidar ese crecimiento deportivo, que ha sido exponencial en las últimas temporadas. Cada año estamos teniendo mejores medios. ¿Si vamos a ganar títulos?, pues ojalá», concluye.