El entrenador del San Pablo Burgos, Diego Epifanio 'Epi', salió anoche del Coliseum con una sonrisa. Y no es para menos, ya que, según reconoció él mismo, «no es fácil ganar a un equipo como Baskonia». Y sus hombres lo consiguieron gracias a ... una actuación coral que levantó, y mucho, los ánimos tras la derrota del pasado fin de semana en la pista del Obradoiro.
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En este sentido, 'Epi' quiso poner en valor el trabajo de sus jugadores durante los cuarenta minutos del encuentro. «Hemos sabido controlar el ritmo del partido, con más o menos acierto, y poner tranquilidad» al juego en los momentos en los que éste se volvía loco. Además, añadió, el San Pablo estuvo «bien colocado» y la actitud fue «de cien» en todo momento.
A juicio del técnico burgalés, esas fueron las claves de un choque en el que el San Pablo fue el equipo que «quiere ser», un conjunto muy alejado del que se vio frente a Obradoiro. «En la primera jornada no estuvimos a gusto», pero en esta segunda sí, gracias, en parte, a la afición. «Este año nos sentimos muy cómodos jugando en el Coliseum», reconoció 'Epi'.
Con todo, en entrenador del San Pablo insistió en que «todavía nos queda la mitad del trabajo de la semana». No en vano, la liga no para y el Tecnyconta Zaragoza visitará el feudo burgalés este sábado. «Si pensamos que con ganar a Baskonia tenemos la liga hecha, estamos muy equivocados», aseguró 'Epi'. Eso sí, el choque de anoche «es el espejo» ante el que hay mirarse para seguir compitiendo esta temporada.
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