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Se veía venir. El Dinamo Sassari amenazaba esta mañana con no disputar su encuentro de este martes frente al San Pablo Burgos si no se permitía que el partido se jugase a puerta cerrar por la crisis del coronavirus. Y cumple su amenaza. Una vez ... la Basketball Champions League no ha aceptado su petición, el equipo ha lanzado un comunicado en el que afirma que se vuelve a Italia sin disputar el encuentro, segundo partido de la Ronda de 16 de la Liga de Campeones de Baloncesto,
En concreto, los italianos afirman que «no están dispuestos a poner en riesgo a su equipo», dado el creciente número de casos de coronavirus que se está registrando en España y, más concretamente en Burgos. «Vista la gravedad de la situación», explican, el equipo está encerrado como medida de precaución en el hotel desde que llegaron a España y, de ahí, se trasladarán en vuelo privado directo a Alghero (Cerdeña).
El Dinamo lamenta la posición adoptada por la Basketball Champions League en este contexto, que ha calificado como «delicado» debido a «una epidemia de alto riesgo de contagio», que requeriría de restricciones como las que planteaban los italianos, y que ya se han realizado en otros encuentros disputados en España.
«España se parece a la Italia de hace un mes. No han entendido cómo combatirlo. Nuestra prioridad y responsabilidad es salvaguardar nuestro grupo», explica el presidente Stefano Sardara, quien insiste que «sin las garantías minimas, no estamos dispuestos a poner en riesgo a nuestros jugadores y cuerpo técnico».
Por el momento el club burgalés no ha emitido comunicado alguno respecto a este partido, aunque esta mañana han afirmado que continuaban «con todo adelante».
El San Pablo Burgos aclaraba que «hay normalidad absoluta a día de hoy para que el encuentro se celebre con la presencia de público en el Coliseum». Además, recordaba que «la responsabilidad última para determinar si la disputa del partido se realiza a puerta cerrada no corresponde a los clubes implicados».
Desde el club castellano confíaban en que la segunda jornada de los octavos de final se pudiera desarrollar con la afición presente en las gradas del pabellón sin ningún tipo de inconveniente, al igual que ocurrió en el partido que se disputó en la isla de Cerdeña la semana pasada, o en el mismo recinto burgalés hace dos días en la Liga Endesa.
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