En Burgos es más difícil observar a los ciervos durante la berrea, pero conociendo los puntos también es posible. GONZALO MARCOS ELVIRA

La vigilancia se refuerza en los montes de Burgos durante la berrea para combatir la caza furtiva

Aunque la berrea está lejos de ser un recurso turístico en la provincia, aumenta el interés por esta actividad. Este año no existe un dispositivo especial dentro de la Reserva Regional de Caza, pero sí se ha solicitado ayuda a la Guardia Civil para controlar los episodios de caza furtiva que suelen ocurrir

Domingo, 2 de octubre 2022, 08:59

En estas fechas y hasta mediados de octubre tiene lugar la berrea del ciervo, el inicio de su apareamiento, un momento único en el bosque para escuchar este bramido y poder observar los ejemplares de ciervo. La provincia de Burgos cuenta con algunas zonas óptimas ... para ello.

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Aunque Burgos tiene algunas comarcas en las que disfrutar de este espectáculo natural no es una provincia tan conocida para ello como otras, como la Montaña Palentina o regiones de Andalucía y Castilla-La Mancha. En estas últimas se cuenta con fincas más extensas, menos bosque, donde es más fácil divisarlos. Pero la provincia de Burgos cuenta con el atractivo natural, la posibilidad de practicar senderismo para alcanzar el punto en el que aguardar a escuchar el bramido. La zona norte de la provincia de Burgos y La Demanda son los lugares en los que más y mejor se disfruta de este espectáculo.

Aumento del interés y vigilancia

Algunos vecinos de estas zonas, de la comarca de Las Merindades y La Demanda, explican que sí va aumentado el interés por la berrea en la provincia, normalmente por otros burgaleses que se acercan por la curiosidad. Ha aumentado el interés por la berrea en Burgos porque, como confirman conocedores del terreno, ha aumentado el número de ciervos en los últimos años. Aunque en Burgos es más difícil llegar a ver a los ciervos debido a la orografía, ha aumentado el interés por esta actividad, aunque algunas asociaciones de guías turísticos consultadas confirman que todavía no se solicita esto como actividad como sí se hace en otras provincias.

Desde el Servicio Territorial de Medio Ambiente confirman que todos los años se establece un operativo reforzado de vigilancia, especialmente en los años lluviosos, por la coexistencia de la berrea y la actividad micológica. Algo que no ocurre este año. No obstante, la capacidad de control es cada vez más reducida, pues la plantilla de celadores ha ido disminuyendo estos años y se encuentra bajo mínimos.

El ciervo se mantiene en esta época más territorial. GONZALO MARCOS ELVIRA

Por ello, por motivos de carencia de personal, como se confirma desde el Servicio Territorial de Medio Ambiente, este año no existe un dispositivo especial dentro de la Reserva Regional de Caza más allá del que el personal de campo puede llevar a cabo. Esta vigilancia reforzada se compagina, además, con la de los permisos de caza que se acumulan en estas fechas.

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Sin embargo, aunque no hay dispositivo especial para este año en la berrea, sí se ha solicitado colaboración a la Guardia Civil para el control de episodios, puntuales e identificados, de caza furtiva entorno a la berrea del ciervo. Se espera contar con alguno porque son habituales en los últimos años, según confirman desde la Delegación de la Junta.

Ciervo macho durante la época de berrea. VALENTÍN GUISANDE

La berrea, una banda sonora única y estacional

En el mes de septiembre y hasta mediados del mes de octubre un sonido envuelve los bosques. Es el momento de un espectáculo majestuoso, se trata de la berrea, la época de celo de los ciervos. Es ahora cuando emiten un profundo bramido para dominar su territorio e impedir que otros machos se acerquen a las hembras. Se encuentran en su momento de apareamiento.

El sonido se apodera del bosque y es más fácil observar, al atardecer o amanecer, a los ejemplares de ciervo. Además del bramido, lucen sus cornamentas y las frotan con las cortezas de los árboles para marcar su territorio o luchan contra otros machos produciendo también otro sonido característico, el del choque de las cornamentas.

La berrea es un momento único del año, que solo tiene lugar en estas fechas y que cada vez atrae a más curiosos. La provincia de Burgos tiene algunas zonas privilegiadas para escuchar este sonido y, si se hace con respeto y conociendo el terreno, para ver a los ciervos.

Puntos de observación

Siempre que se realiza una actividad en la naturaleza hay que procurar producir el menor impacto y dejar la menor huella posible. La berrea confluye con la existencia de otros usos de los bosques, a la visualización se une el senderismo, las pruebas deportivas, la caza, la micología. Por ello, la Dirección Técnica, en colaboración con los ayuntamientos y juntas vecinales propietarios de terrenos incluidos en la Reserva Regional de Caza, tiene intención de establecer una red de puntos de observación fijos y señalizados.

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El objetivo es dirigir hasta estos puntos a los observadores y facilitar así la compatibilidad de actividades en el monte con el aprovechamiento cinegético. La caza es una de las actividades principales de estas fechas.

Un ciervo durante la berrea. VALENTÍN GUISANDE

Recurso turístico

La berrea no ha alcanzado en la provincia de Burgos los niveles de atractivo turístico que sí tiene en otros puntos. «En Burgos todavía genera poco interés porque es más complicado llegar a ver los ciervos», explica un vecino. Pero Luis Marcos, director de UBUVerde, explica que va aumentado el interés por ir a escuchar o ver la berrea en Burgos.

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«Se ha incrementado el turismo de naturaleza, ya sea de forma individual o grupal, y la gente quiere experiencias nuevas. Este puede ser otro recurso turístico más que ya se explota en otras zonas y se retroalimenta con otras actividades. Aunque sea más difícil la observación se puede unir a eso, a una ruta de senderismo, disfrute del bosque, hasta llegar al punto de observación. Eso sí, por eso son importantes los expertos, las indicaciones y la educación ambiental, hay que respetar el entorno, no ser invasivos y respetar a los animales, especialmente en un momento tan específico como este del apareamiento», apunta Marcos.

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