La pandemia de la covid-19, con sus restricciones de movilidad, sus medidas de seguridad, sus cierres perimetrales y sus consecuencias, ha quedado definitivamente atrás para el turismo rural de Burgos. Los establecimientos de la provincia rozarán el 100 % de ocupación esta próxima Semana Santa, ... volviendo a la senda de la normalidad.
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La Asociación de Turismo Rural de Burgos (Turalbur) espera una Semana de Pasión «afortundamente buena». Es una de las mejores épocas del año, recuerda el portavoz, Domingo Hernández, pues se mueve mucha gente en poco tiempo. El turismo se concentra en los días centrales, del Jueves Santo al Lunes de Pascua, con tres y cuatro noches.
Así que, al menos en los establecimientos adheridos a la asociación, se espera una alta ocupación, con un lleno en muchas jornadas. Es el fin de semana cumbre de abril, pues el anterior, el del Domingo de Ramos, suele ser «muy flojito». Algo más activo está el posterior, gracias a aquellos que han trabajado en Semana Santa y tienen el gusanillo de viajar.
Familias, grupos de amigos y parejas constituyen el cliente habitual del turismo rural, que en esta época del año suele venir de algo más lejos. Además, del País Vasco o Madrid, aprovechando que son varios días de fiesta viene gente de Cataluña o Valencia. Y sin importar la previsión del tiempo, que es buena, pues las reservas se hacen con antelación.
Además de Semana Santa, los socios de Turalbur ya están notando las reservas para el siguiente gran puente, el del 1 de mayo. Este año, debido al cambio de calendario laboral, el 23 de abril no es festivo en Castilla y León. La fiesta de la comunidad, que cae en domingo, no se pasa a lunes, y ese día festivo se recupera el 25 de julio.
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Hernández afirma que, desde el punto de vista turístico, «no lo van a notar prácticamente nada», pues al ser un festivo autonómico no mueve mucho turismo en Burgos. Pero el cambio al 25 de julio tampoco va a atraer más actividad, pues ya pilla en época vacacional. «Preferimos un puente festivo en periodo lectivo y no en verano, que no se notará», ya que los que no tengan vacaciones esos días se irán más a la playa.
Eso sí, el portavoz de Turalbur insiste en que no se puede vivir solo de los puentes, pues hay 52 fines de semana al año. Cierto es que la ocupación en fecha señaladas es elevada, pero la ocupación media suele caer al 30%. De ahí que el sector pida más promoción del turismo de interior, que vaya más allá de puentes y fechas claves.
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