El turismo burgalés, en cifras 'residuales' a finales de 2020 debido a la pandemia

En el mes de noviembre del año pasado la provincia de Burgos recibió a 52.241 viajeros, de estos 39.782 procedían de España y 12.458 llegaban del extranjero. En cambio, este pasado mes de noviembre, en plena pandemia de la covid-19, con repunte de casos y el cierre perimetral de la comunidad autónoma, además del toque de queda, Burgos ha recibido a 10.338 viajeros, una caída del 80,21 por ciento en un año. De estos, 8.140 llegaban de dentro de nuestras fronteras y solo 2.198 llegaban de fuera de las fronteras nacionales.

Este descenso en la llegada de personas a la provincia deja el turismo en cifras residuales, aunque noviembre no sea uno de los meses más turísticos pese a contar con el puente de Todos los Santos. Este fenómeno se siente en los hoteles de la provincia, muchos de ellos cerrados ante la ausencia de clientes.

Las pernoctaciones hoteleras han caído en la provincia de Burgos un 73,8 por ciento en un año. En noviembre de 2019 fueron 83.428 las pernoctaciones registradas, mientras que este noviembre se han quedado en 21.869, un 73,8 por ciento menos. En este caso, las cifras de pernoctaciones producidas por viajeros extranjeros también se quedan en cifras residuales. 17.417 pernoctaciones de residentes en España frente a las 4.453 pernoctaciones de personas extranjeras.

El descenso de viajeros y pernoctaciones repercute en la pérdida de empleos en el sector hotelero burgalés. Frente a las 949 personas empleadas en noviembre de 2019 en establecimientos hoteleros en Burgos se ha pasado a 430, una caída del 54,69 por ciento en el empleo.

Y es que en noviembre permanecían abiertos 110 establecimientos hoteleros frente a los 197 del mismo mes de 2019. El grado de ocupación de habitaciones ha caído en un año del 39,04 por ciento al 19,34.