Tractores a las calles burgalesas para limitar la PAC a los agricultores a título principal

Lo que UCCL reclama es una PAC más justa y enfocada a los agricultores y ganaderos a título principal, una reivindicación histórica de la UCCL. Actualmente, Europa se encuentra en la última fase de la negociación del Plan Estratégico de la PAC. España tiene que acudir en junio a Europa con sus propuestas. De lo que se decida dependerá lo que los agricultores y ganaderos burgaleses cobrarán en los próximos siete años.

UCCL insta al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y a la Junta que apueste por una PAC destinada a los profesionales del campo que viven realmente de la agricultura y la ganadería. Es decir, a la figura del agricultor a título principal (ATP), como señala Susana Pardo, presidenta de UCCL en Burgos. «Nuestro objetivo es que la PAC la reciban aquellos trabajadores del campo que tienen, al menos, un 25 por ciento de sus ingresos procedentes del campo», explica Pardo.

Se pide también que no se destine a los que tienen esta actividad como secundaria. Además, se reclama que para recibir estas ayudas se debe estar dado de alta en el régimen de la Seguridad Social Agraria. «De esta forma sería menos número de personas entre las que repartir las ayudas, lo que beneficia a los que realmente tienen la agricultura como actividad principal», señala Pardo. En Burgos, aproximadamente un 69 por ciento de los agricultores de Burgos están dados de alta en la Seguridad Social Agraria.

De ser así, de cumplirse con estas medidas que la UCCL reclama para la nueva PAC, un 40 por ciento de los aproximadamente 9.000 agricultores y ganaderos que hay en la provincia de Burgos podría cobrar esta PAC. UCCL también pide que las administraciones públicas no cobren esta ayuda.

«Es el momento de forzar, de obligar a que nos escuchen. El ministerio habla de dejar la figura del agricultor a título principal en aquellos que tengan entre un 20 o 30 por ciento del total de sus ingresos procedentes de esta actividad. El problema es que esto es una horquilla y no hay nada sobre el papel. Tenemos miedo de que se quede en el 20 y no en el 30», aclara Pardo.

Igualmente, UCCL pide que la ayuda redistributiva que es de un 20 por ciento de la PAC sea exclusiva para los ATP que tengan un 51 por ciento del total de sus ingresos procedentes de la agricultura o a ganadería.

«Se deben fijar unos costes de producción oficiales y públicos que sean el punto de partida para la negociación del precio en los contratos y que exista preferencia comunitaria y control en origen y en frontera de los productos de terceros países para que cumplan los mismos requisitos que los nuestros», apuntan desde UCCL.