El tiempo en Burgos según Aemet: lluvia y descenso de temperaturas esta semana

Después de confirmarse que abril ha batido todos los registros históricos en cuanto a temperaturas máximas, Aemet prevé que esta semana se presente más primaveral que las anteriores en Burgos. Si este lunes la máxima será de 25 grados, el martes descenderá a los 22 y, a partir del miércoles no superará los 18 grados. La mínima irá en descenso también, con 8 grados mañana y 6 y 5 durante el miércoles y el jueves.

Además, la previsión de Aemet contempla tormentas en Burgos a lo largo de la jornada del martes, especialmente a partir de las 12 de la mañana. El miércoles en cambio, se esperan nubes y claros en la capital.

En Miranda de Ebro hará más calor esta semana que en la capital aunque también acusarán un descenso de las temperaturas. Según Aemet, este martes los termómetros marcarán 25 grados con mínimas de 9 pero el miércoles no superarán los 18 de máxima y el jueves se quedarán en 17. Las mínimas irán en descenso con los 8 grados del miércoles y los 6 del jueves.

Las lluvias llegarán también a Miranda. Aemet prevé que haya precipitaciones este martes, especialmente durante la mañana y se espera que el jueves llueva durante toda la jornada.

La capital riberaña seguirá la tónica del resto de la provincia, aunque la probabilidad de lluvia es menor que en Burgos y Miranda. Eso sí, las máximas bajarán también. Según Aemet este martes los termómetros oscilarán en Aranda entre los 9 y los 24 grados y durante el miércoles y el jueves la máxima se instalará en 20 y la mínima en 5.

Las precipitaciones podrían producirse este martes, especialmente entre las 12 y las 18 horas, aunque con menor probabilidad que en otros puntos de la provincia. De cara al miércoles y al jueves se esperan nubes y claros.

En todo caso, aunque se esperan lluvias, por el momento no hay previsión de que se produzca una tormenta de granizo similar a la que asoló parte de la provincia hace una semana.

En ese caso, tras varios días con temperaturas muy por encima de lo habitual para esta época del año, el agua hacía acto de presencia en forma de tormentas localmente fuertes acompañadas, en algunos casos, de granizo. Pedrisco que afectó a unas 50.000 hectáreas con pérdidas de 60 millones de euros.