«Solo el pueblo salva al pueblo», solidaridad desde Puentedura frente a la covid-19

Los fondos irán para esta red que surgió a principios de marzo de 2020 en la capital burgalesa, antes de la declaración de emergencia sanitaria. Un grupo de amigos, intuyendo la situación que se avecinaba y cómo esta iba a afectar, especialmente, a la clase trabajadora de la ciudad, comenzó a organizarse con el vecindario para hacer posible el apoyo mutuo en los distintos barrios y crear una red de apoyo.

En este caso, ACRN ha querido dar un paso adelante y aportar su granito de arena en la ayuda a los más vulnerables, «gran parte del espíritu de ACRN es este, la construcción de comunidad», explican, «un camino lleno de baches y sin mapas, pero que nos ha permitido, hasta el momento, organizar varias ediciones del festival Arlanzarock y gestionar espacios de disfrute colectivo».

La idea surgió de esta asociación de Puentedura que, como cualquier pueblo castellano, está muy duramente castigado por la despoblación, «apenas se pueden contar 50 vecinos la mayor parte del año», señalan. Sin embargo, «es un pueblo que mantiene 'buen tono muscular' en sus relaciones sociales, que se expresa más allá de ese retorno, casi religioso, de todos los veranos, de las generaciones posteriores a las que protagonizaron el éxodo», apuntan desde ACRN.

En Puentedura hay una urdimbre de propuestas e iniciativas que no solo adornan el pueblo, también le dan carácter. Ahí se ha forjado ACRN y su carácter, al igual que este proyecto solidario. Reconocen que no son una excepción, «todo lo contrario, esta manera de hacer territorio, de mantener el vínculo con el mundo rural, es lo que podríamos llamar una estrategia de resistencia propia de nuestra cultura popular».

La decisión de embarcarse en este proyecto está motivada por la crisis generada por la covid-19. «Si antes alguien podía albergar alguna duda razonable sobre la necesidad de fomentar instituciones propias, autónomas, del pueblo, ahora ya deberían de haberse disipado», explican desde ACRN.

'Solo el pueblo salva al pueblo' como aquel viejo lema que hacen propio para esta iniciativa solidaria. «Con un sistema público hecho un cisco, que depende del Gobierno de turno o de tecnócratas que, al final, solo rinden cuentas al mercado, resulta cada vez más acuciante hacer saltar del imaginario a los hechos este lema», apuntan los promotores de la iniciativa.

Optaron porque los 'beneficiarios' de la recaudación de la venta de esta camiseta fuera Red de Solidaridad Burgos porque esta reparte cestas con alimentos a más de 200 familias, «las empuja a tomar cartas en sus asuntos superando el asistencialismo y, además, rompe con ese relato machacón que no deja de responsabilizar a los de abajo de sus penurias», señalan.

Hace poco más de un mes comenzó la difusión de la iniciativa y poco antes estaban barruntando la idea en sus conversaciones. La asociación es la casa común que da entidad a la iniciativa pero, en esta ocasión, han prescindido de protocolos y han funcionado como una cadena de afinidades para ganar en agilidad.

Reconocen que la respuesta en este breve margen de tiempo ha sido «muy positiva, rompiendo todos nuestros pronósticos». En gran medida, ha influido que se han movido por las redes sociales, con lo que se han desbordado los círculos familiares, vecinales, de amigos... «nos han llegado peticiones hasta del sur de las geografías castellanas como Guadalajara».

«Estamos seguros que la principal causa del éxito es el destino al que se dedica la recaudación, pero también nos preguntamos, si somos honestos, por el peso que ha tenido la recepción del mensaje. Su acogida en una tierra desposeída de identidad y olvidada en la memoria. Hay una deuda pendiente con la dignidad de nuestro propio pueblo y la única manera de saldar esta deuda es con solidaridad, esfuerzo y rebeldía», añaden desde esta asociación burgalesa.

Tienen claro desde ACRN que «un repaso a la historia es el mejor ejercicio para comprobar cómo en la misma medida que estas instituciones gozan de buena salud, y por tales nos referimos desde los concejos abiertos en Castilla hasta los sindicatos cuando no son meras correas de transmisión, mayor es la cohesión social, aumentan las garantías de resguardo y más avanzan las conquistas sociales». Ante el futuro incierto que se nos avecina, «ya se vislumbra como una intemperie, esto no es baladí: es innegable que las crisis se repiten con mayor frecuencia y mayor profundidad», reflexionan.

Todos aquellos que quieran contribuir en la mejora de la vida de los que están a su lado, de los que conviven con ellos, pueden encargar su camiseta en el correo electrónico arlanza_rock@hotmail.com.