Los trabajadores de la residencia intervenida en Adrada denuncian la falta de pago

El sindicato está asesorando a cuatro trabajadoras de la residencia que se han puesto en contacto con ellos para intentar solventar su situación laboral. «Lo lógico es que reclamen esas cantidades que les deben, a no ser que la empresa les comunique que va a retomar la actividad, les va a pagar y que luego lo cumpla. Están esperando a ver si hay noticias, pero no contestan», indica.

En este sentido, tras requerir a la empresa que comunique a las trabajadoras la situación en la que se encuentran, el siguiente paso será presentar una reclamación a la Inspección de Trabajo. «La residencia está cerrada ahora mismo, entonces el problema es si van a renunciar o no, hacer un ERTE ahora lo tendrían complicado porque es el sector sociosanitario», explica Manuel Álvarez. En cualquier caso, si sigue esta línea, se tendrá que calcular y reclamar las cantidades que se adeudan y presentar las denuncias pertinentes.

Una de las trabajadoras que se encuentra en esta situación, narra que la gestora de la residencia «ni tan siquiera ha llamado para decir que está cerrada, lo sabemos por las noticias y familiares, a los que ni tan siquiera ha llamado para decirles que trasladaban a sus allegados, aunque a algunos sí les ha pasado el recibo de la cuota por el banco». En este sentido, indica que lo único que ha trasmitido la responsable de la residencia a algunos trabajadores es que «no hay dinero para pagar» e insiste en que tampoco han cobrado los que estaban de baja.

La Junta de Castilla y León intervino la residencia Valle del Cuco el 25 de marzo y, dos días después realojaba a los mayores en otros centros públicos de la región, al no encontrar personal. En el momento de la intervención solo trabajan tres personas con un total de 31 residentes a los que no se había practicado prueba alguna de covid-19, de los cuales 18, presentan fiebre o síntomas que pudieran ser compatibles con el coronavirus y 13, sin fiebre u otros síntomas aunque han estado en contacto con los anteriores. La plantilla original era de 23 personas.

A partir de ahí, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Aranda de Duero ha abierto diligencias previas para investigar la existencia de posibles responsabilidades penales sobre la situación de la Residencia Valle del Cuco de Adrada de Haza. La decisión se ha tomado tras recibir la información de la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta y con los informes de Fiscalía y los cuerpos policiales.