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Un joven de 26 años se enfrenta a una pena de 12 años de presión, acusado de un delito continuado de abusos sexuales cometidos, presuntamente, contra su sobrino menor de edad. Los hechos que se enjuiciarán este mes de abril en la Audiencia Provincial de ... Burgos tuvieron lugar entre 2011 y 2012 en Aranda, según se recoge en el escrito de acusación del Ministerio Fiscal.
El sujeto, que entonces contaba con 19 años, aprovechaba las visitas de su sobrino de siete años a la casa familiar para, en su habitación o un baño, realizarle tocamientos, o pedirle que se los practicar a él, llegando incluso a intentar penetrarlo en alguna ocasión. Todo ello «con ánimo de satisfacer sus instintos libidinosos», afirma la Fiscalía, quien apunta a que este tipo de actuaciones se venían produciendo desde el año 2008.
El fiscal pide para el acusado, en prisión desde 2017, 12 años de cárcel por un delito continuado de abuso sexual a un menor de edad. También 8 años de libertad vigilada y una indemnización de 30.00 euros para la víctima, en concepto de daños morales.
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