El retén de bomberos de Aranda se ha activado una docena de veces en menos de un mes

El retén de bomberos de Aranda de Duero se ha activado una docena de veces desde que se retomara ese servicio de guardia el pasado 12 de agosto, tras más de tres años y medio sin prestarse.

Desde el Servicio de Extinción de Incendios se considera que, en cada una de estas salidas, el retén «ha sido determinante para garantizar la seguridad de los ciudadanos y permitir la intervención simultánea en diferentes localidades, asegurando que el servicio de bomberos pueda atender a todas las emergencias sin perder efectividad».

Algo que, según los bomberos, se hizo más evidente el pasado martes 3 de septiembre, cuando una tromba de agua afectó a Castrillo de la Vega y otras pueblos de la comarca y «gracias a la activación del retén, se movilizaron hasta 15 efectivos, más de la mitad de la plantilla, que durante la tarde-noche pudieron prestar auxilio a seis conductores atrapados por las inundaciones».

Al respecto, desde el parque arandino se precisa que los tres primeros avisos fueron para socorrer a personas cuyos vehículos fueron arrastrados por la corriente en plena N-122, quedando atrapados con el agua por encima de la cintura. Además, los bomberos atendieron una salida de vía causada por el barro acumulado, lo que mantuvo la carretera cortada al tráfico durante varias horas. También se ayudó a dos camiones que quedaron atascados en el lodo.

De forma paralela, los bomberos acudieron a Castrillo de la Vega para atender varias viviendas y un bar inundados, además de achicar agua en una casa de Campillo de Aranda. «Este tipo de actuaciones pone de relieve la necesidad del Retén de Bomberos, que no solo garantiza una respuesta rápida y efectiva ante emergencias, sino que también refuerza la seguridad de los equipos intervinientes y permite una rotación constante en situaciones de larga duración, asegurando la continuidad del servicio», destacan.

Además, durante el mes de agosto, el retén se activó una docena de veces en veinte días, ya que entro en vigor el día 12 tras su aprobación en el pleno de julio. A grandes rasgos, los bomberos tuvieron que atender varios incendios, accidentes, la caída de un árbol y una inundación en el paseo de la Virgen de las Viñas en Aranda.

«Queremos destacar la importancia de la reciente puesta en marcha del Retén de Bomberos, aprobado en el pleno del pasado mes de julio. Este servicio adicional ha demostrado ser fundamental para mantener la capacidad operativa de los bomberos, garantizando una respuesta rápida y eficaz ante emergencias, especialmente en situaciones de siniestros simultáneos o consecutivos», insisten desde el Servicio de Extinción de Incendios. Algo que califican como «vital», más aún cuando el Ayuntamiento tiene suscrito un convenio con la Diputación de Burgos para prestar servicio a numerosos municipios de la provincia.

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