La Plataforma por el Directo exige a la Junta que reivindique también el tráfico de pasajeros

Unas declaraciones que hubieran pasado por alto si no hubiera sido por que unos días antes, el que fuera alcalde de Burgos Javier La Calle, también del partido popular, pidió del mismo modo una apertura de la línea «solo para mercancías». En su opinión, «los arandinos pueden desplazarse en autobús de forma muy competitiva». Asimismo, Lacalle consideró que con la llegada del AVE a Burgos la demanda de pasajeros iba a mermar el número de pasajeros sobre la línea e imposibilitaría la explotación de la línea Madrid-Aranda-Burgos para pasajeros.

A estas declaraciones habría que añadir las de Emilio Berzosa, exconcejal en el Ayuntamiento de Aranda y Duero y actual procurador en las Cortes de Castilla y León de la mano del PP, que el pasado mes de julio defendió la Proposición no de Ley en la que se pedía la apertura de la línea que pasa por su pueblo, para mercancías.

Para la Plataforma por el Ferrocarril estas declaraciones evidencian «el nulo interés y la falta de atención que les merece al PP de Castilla y León los ciudadanos de su comunidad». Este colectivo ciudadano tacha de «hecho grave» el que casi la totalidad de las estaciones de la línea se hayan ido demoliendo una tras otra quedando actualmente apenas tres estaciones en pie y que desde la junta nunca se haya dicho nada por este hecho. Sin embargo, lo peor de todo este tira y afloja «es el alto grado de ineficiencia, desconocimiento e implicación para con la línea», aseguran desde la Plataforma. «Entre otras cosas hay que recordar que la Junta no propuso al Estado la inclusión de esta línea al Corredor Atlántico para que pudiera tener un servicio de pasajeros, ni tampoco al European Freight Corridor que también lo posibilita y cuenta con financiación Europea más que sobrada», destacan.

Tampoco han sido capaces los dirigentes regionales, prosiguen, «de entender que muchos de los alcaldes de su formación en Segovia y en la Sierra Norte de Madrid reclaman el uso para pasajeros y que hacen esfuerzos ante la presidenta de la comunidad de Madrid para que así sea». Una crítica que resumen que desde la Junta de Castilla y León se están arrastrando «errores serios incluso de comunicación con miembros de su mismo partido». Esta situación, puntualizan, lo único que evidencia «no es que los arandinos y ribereños no quieran tren, sino que son sus gobernantes quienes les privan su derecho a tenerlo y que la falta de interés por esta infraestructura propicia el robo sistemático de los fondos del mantenimiento de la línea en la misma cara de este organismo». Indican que el desconocimiento de la situación es tal grado «que la Junta ni siquiera ha entendido que el gobierno al menos ha posibilitado que el proyecto de la apertura del túnel deje la puerta abierta a que circulen pasajeros y que el actual alcalde de Burgos ya ha manifestado que el PSOE quiere que la línea sea para pasajeros y mercancías».