40 municipios del sur de Burgos se quedan sin bomberos desde el 1 de enero

Una situación que han denunciado Mar Alcalde y Sergio Ortega, integrantes del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Aranda de Duero, en una rueda de prensa celebrada este viernes, según recoge la agencia Efe.

«Nos encontramos una vez más en el 27 de diciembre en una situación que, sin ser alarmistas, pero sí responsables, altamente peligrosa«, ha indicado el concejal.

Ortega ha explicado que el acuerdo que ha vinculado durante los últimos cuatro años a la Corporación provincial burgalesa y al Consistorio de la capital ribereña finaliza su periodo de vigencia el próximo 31 de diciembre, sin que haya posibilidad de prórroga y sin que ambas instituciones hayan llegado a un acuerdo para renovarlo.

De hecho, mientras el Ayuntamiento de Aranda reclama a la Diputación una aportación anual de 350.000 euros, atendiendo a una media del coste de las salidas que el Cuerpo de Bomberos local realiza a la comarca, la Diputación pretende reducir su contribución a 190.000 euros, 35.000 menos de lo que pagaba hasta ahora.

La situación se ve agravada con el hecho de que los propios bomberos de Aranda han denunciado el convenio que mantienen con el Ayuntamiento para regular que, en el momento en que el operativo de servicio salga a alguna incidencia, se active el retén de guardia.

De esta manera, se garantizaba que en todo momento hubiera personal para atender posibles llamadas. Pero al denunciarse este acuerdo, no habrá relevo cuando los trabajadores del Servicio de Extinción de Incendios estén en algún operativo.

Desde el Grupo Municipal Socialista se ha lamentado que, después de casi nueve años en el cargo, la alcaldesa de Aranda, Raquel González, no disponga de la capacidad para llamar directamente al presidente de la Diputación, César Rico, y urgir una solución.

«Y si no tiene esa capacidad, nos preocupa mucho que estemos entrando en el famoso teatro y paripé político de primero hago una oferta a la baja, me enfado mucho y entonces digo mira qué bien he negociado que he mejorado lo inicial», ha apuntado Ortega.

Mar Alcalde, por su parte, ha considerado que la solución a esta situación pasa por una doble vía, alcanzar un acuerdo vía alegación al presupuesto de la Diputación, que no se prevé aprobar hasta el 16 de enero, o recurrir a los tribunales y plantear un contencioso administrativo reclamando lo que las arcas municipales arandinas tienen que desembolsar al asumir una competencia de la Diputación.