Los jugadores apelan a su inocencia y afirman ser víctimas de una «denuncia falsa»

Una vez concluida la sesión, los acusados, por primera vez, se han dirigido a los medios de comunicación. Carlos Cuadrado 'Lucho' ha explicado que los dos años desde la denuncia y, en especial, los tres meses que permanecimos en prisión provisional han sido «un infierno para nosotros». En este sentido, ha incidido en que igual «que pedimos justicia para la gente que es culpable, también pedimos justicia para la gente que es inocente, en este caso, nosotros». Al respecto, ha insistido en que «estamos convencidos de que es una denuncia falsa».

Por su parte, Víctor Rodríguez ha confesado que «tenemos miedo, es una sensación muy rara». Ha mostrado su esperanza de que «se solucione porque no tiene sentido, por más que lo pienso no le veo sentido a la denuncia. No sé, el cúmulo de mentiras es un despropósito. No lo entiendo, yo no he hecho daño a nadie, igual que ellos, esto es increíble». En esta línea, ha lamentado que la menor subiera al piso, «si no hubiera entrado en casa no habría pasado nada de esto, es increíble». Visiblemente nervioso y emocionado y apenas sin poder hablar se mostró, Raúl Calvo ha recalcado que ha dicho «que soy inocente y que se haga justicia».

En la misma línea se ha posicionado su abogada, Olga Navarro, quien ha mantenido que las pruebas están a favor de los futbolistas. «No hay pruebas de cargo, sino de descargo», ha opinado. Asimismo, ha indicado que espera que «haya una sentencia que de verdad demuestre que todo es una gran patraña y que es mentira ya que ha destrozado la vida a tres chicos». Respecto al mantenimiento de penas por parte de las acusaciones, el abogado de Víctor Rodríguez, Rafael Uriarte, ha considerado que «siguen una rutina absurda y cruel, mantenerlo y no enmendarlo. Además, sin fundamento porque han mantenido las penas y luego en sus alegatos no las han apoyado con las pruebas que han salido, sino con cuatro reflejos medio colocados a la fuerza».

Las acusaciones han defendido que existen pruebas suficientes para conseguir una sentencia condenatoria. «Mantengo la acusación; estoy convencido de que son culpables de los hechos denunciados y en este sentido esperamos una sentencia favorable», ha detallado Luis Antonio Calvo, abodado de la Asociación Clara Campoamor. En lo que se refiera a la abogada de la menor, Patricia Ortiz, ha afirmado que «salimos satisfechos» y ha mostrado su deseo de que «salga la sentencia cuando antes para que la niña esté lo más tranquila posible pronto».

Las acusaciones han considerado como prueba fundamental la inactividad en los móviles de la víctima y los futbolistas en el momento en el que están fechados los hechos. Calvo ha insistido en que «existe un periodo de más de una hora en el que nadie usa los móviles para nada y todo el tiempo están usando los móviles antes y después». En su opinión, eso «significa que pasó algo» sobre todo si tenemos en cuenta que en los «periodos posterior y anterior están continuamente con el móvil».

En las conclusiones del estudio de los cuatro móviles, realizada por expertos de la Policía Nacional, destaca la falta de actividad de llamadas o mensajería en el momento en el que están fijados los presuntos hechos entre las 20:00 y las 21:20 horas. Hay un vacío en todos los teléfonos entre las 20:10 y las 21:19 horas. El único movimiento que se detecta se sitúa en el móvil de Carlos Cuadrado quien, a partir de las 20:43 horas y durante tres minutos, accedió a una página «de contenidos pornográficos», en la que «se visitaron diferentes contenidos, con un listado de vídeos con contenido sexual explícito».

La Fiscalía y las acusaciones populares solicitan que se condene a los jugadores como autores de un delito de agresión sexual a una menor de 16 años, de dos delitos de agresión sexual como cooperadores necesarios y de un delito contra la libertad sexual. La Fiscalía pide 39 años de cárcel para Víctor Rodríguez y Carlos Cuadrado, respectivamente, y solicita 40 años para Raúl Calvo. Por su parte, la acusación popular solicita 43 años y ocho meses para cada uno de los acusados y la petición de la acusación particular se eleva a 44 años a cada uno de los futbolistas.

Por su parte, las defensas en sus escritos finales van a mantener la petición de libre absolución afirmando que no pasó nada, pero han incluido algunas modificaciones que plantean atenuantes en el caso de condena. En concreto, aludirán al artículo 14.3 del Código Penal, sobre el desconocimiento del delito y la edad de la víctima. La defensa del Raúl Calvo aludirá también al test que le equipara en madurez a la víctima e incluirá en los atenuantes el artículo 183 quarter del Código Penal, donde se dice que «el consentimiento libre del menor de 16 años».