Desmontando la telemedicina en clave de humor

Bajo el lema 'En un lugar del medio rural de Castilla y León' se han lanzado tres nuevos vídeos en los que se escenifica los problemas de la telemedicina, desde la falta de cobertura, hasta las dificultades que supone para una población envejecida y la imposibilidad de mostrar unas amígdalas a través de una videoconferencia. «Ante la desoladora situación que vivimos, desde Sanidad Rural nos vemos obligados a volver a la carga, utilizando el humor como forma de denuncia, esta vez lanzando vídeos cortos en los que mostramos algunas de las desventajas de implementar el modelo de la telemedicina en las zonas rurales», defiende la portavoz del colectivo, Rosa Guillén.

La plataforma ciudadana considera que la telemedicina, como forma de acercamiento al paciente, degrada de forma «alarmante» la calidad de la Atención Primaria. «El examen o la exploración física son imprescindibles en el diagnóstico clínico, incluyendo aspectos como la inspección, la palpación, la auscultación y la percusión, que no se pueden llevar a cabo con un paciente a distancia», detallan a través de una nota de prensa.

En esta línea, destacan que la falta de atención presencial puede derivar en diagnósticos erróneos que «ponen en peligro la vida de las personas», como ya se ha hecho patente con campañas previas como la de #PorTeléfonoNoSeCura. En cualquier caso, recalcan que se oponen al uso de la telemedicina como base de la Atención Primaria tanto en el medio rural como en el urbano, «porque consideramos que vulnera el derecho a la salud de las personas».

El colectivo denuncia que, después de la pandemia, «a los pueblos nos obligan a elegir entre hacer videollamadas con nuestro médico de cabecera o tener los consultorios completamente cerrados». Ponen como ejemplo lo sucedido en Monumenta de Sayago (Zamora) que, tras el éxito mediático de su contador, un empleado para denunciar el número de días sin médico, se anunció una consulta presencial una vez al mes. «No se hizo para tratar de mejorar la atención, sino para intentar silenciar a aquellos que denuncian una situación injusta. En 681 días, tan sólo se ha pasado consulta una vez. Si esta es la solución que proponen a la supuesta falta de médicos, es que no tenemos buenos gestores», concluye la plataforma ciudadana.