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4.000 personas respaldaron este sábado la primera edición del festival Sonorama en México. Un evento en el que se unió la música española y mexicana, con el maridaje con el vino de la Denominación de Origen Ribera del Duero. Más de doce horas ... de música en el parque del Bicentenario de Ciudad de México, que se abrieron a mediodía con los acordes de Andreew y cerraron el telón pasada la media noche con la propuesta gamberra de Ladilla Rusa. Entre medias destacaron las actuaciones de Arde Bogotá, Porter, Shinova, Dorian y Café Quijano.
«Esto es el comienzo de algo increíble, os lo prometo», afirmaba el director de SonoraMEX, Javier Ajenjo, desde el escenario principal, haciendo referencia a la pervivencia del festival de cara al futuro. Al respecto, desvelaba en el escenario cómo una cita nacida en Aranda de Duero hace 26 ediciones, ha logrado cruzar el charco para hacer un festival en México «porque es una tierra que siente la música y siente la vida», haciendo una comparativa con la capital de la Ribera del Duero.
«Siempre soñamos en hacer un festival en el lugar que nacimos, crecimos y donde todavía vivimos y ahora también hemos cumplido el de estar aquí», incidió. En este sentido, agradeció el apoyo de la Junta de Castilla y León, el Consejo Regulador de Ribera del Duero y el Centro Cultural de España en México, para que el festival en la capital azteca haya sido posible.
El vino fue, además de la música, otro de los triunfadores en el parque del Bicentenario, con un winebar donde se sirvieron referencias de calidad de una docena de bodegas elaboradoras. En la propuesta también se ofrecía la posibilidad de adquirir una denominada 'experiencia vitícola', que daba la oportunidad de catar cinco vinos de Ribera del Duero.
Se agotaron los tickets y se vendieron hasta 300 experiencias, además de decenas de copas a título individual. «Ha sido un éxito masivo de Ribera durante todo el día. Nos hemos quedado sin copas y todo. La gente se la llevaba de recuerdo», ha detallado el director de SonoraMEX.
Durante doce horas y en dos escenarios gemelos para evitar interrupciones, el festival fue cogiendo fuerza, a la vez que el aforo iba ganando público de forma gradual. Arde Bogotá, que venía de dos actuaciones previas en tierras mexicanas, en Aguascalientes y Guadalajara, fue uno de los más aclamados. La banda murciana apostó por una selección de sus temas de mayor fuerza para «hacer bailar al público» en una «fiesta» de concierto, y finalizar en todo lo alto con 'Los Perros'.
Shinova se ganó también al público mexicano, en su primera vez en el país. Ondeando una bandera mexicana, irrumpieron en el escenario para intercalar sus mayores éxitos con temas de su nuevo disco. Que Dorian tiene ganado al público azteca fue otra de las cosas que quedaron claras en el festival. Los asistentes corearon y bailaron cada uno de sus temas, especialmente su himno a 'A cualquier otra parte'.
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Se reencontraron también con uno de sus públicos más fieles, los hermanos Café Quijano. Recién llegados de una actuación en Londres, el trío compartió previamente una charla con sus seguidores en una repaso a la estrecha relación que une a los Quijano con el país.
Los Mexicanos Porter y La Gusana Ciega pusieron el toque del país anfitrión demostrando que tiene el favor de su público. Rufus T Firefly, Andreew, Barry B, Rocío Ruiz, Garza Durán, Kitai, Zeballos, Los Invaders, Disco Bahía y Eric completaron el cartel de SonoraMEX.
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