La provincia destruye 1.200 empleos en el mes de marzo hasta alcanzar los 20.184 desempleados

La variación anual, por su parte, arroja una cifra similar, en comparación con marzo de 2019 el desempleo ha aumentado en la provincia burgalesa un 6,32 por ciento, según datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

La caída del empleo es notable pero los puntos porcentuales arrojan mejores cifras en la provincia que la media nacional. El incremento del paro a nivel nacional en comparación con el mes anterior es del 9,31 por ciento frente al 6,34 por ciento que arrojan los datos provinciales. Igualmente, respecto a marzo de 2019 a nivel nacional el paro se ha incrementado un 9,01% frente al 6,32 por ciento provincial.

Las cifras en la provincia de Burgos vuelven a arrojar una fuerte diferencia entre hombres y mujeres desempleados. Frente a las 11.388 mujeres que están en el paro en Burgos hay 8.796 hombres, por lo que el desempleo sigue afectando más a las féminas.

El sector más afectado por la crisis del coronavirus en marzo ha sido, con diferencia, el de servicios. De los 1.203 empleos que se han perdido a lo largo del mes de marzo, 819 pertenecen al sector servicios, donde las personas desempleadas ya suman 13.913. Por detrás, pero a mucha distancia, se encuentra la industria con la pérdida de 196 empleos en un mes hasta situarse en los 2.639 parados. En la construcción se han destruido 121 empleos y los parados son 1.434 en toda la provincia. En cambio, la agricultura ha perdido 41 empleos y los parados en este sector son 1.043.

Estos datos negativos que arroja marzo son más significativos si analizamos la tendencia que arrojaba febrero, cuando el número de desempleados en la provincia de Burgos se había reducido en dos puntos en un año. Las dos semanas comprendidas entre el 16 de marzo, cuando se decretó el parón laboral, y finales de este mes de marzo han sido devastadoras para el empleo, en la provincia y a nivel nacional. No solo por los contratos que se han destruido, antes de que se considerase ilegal despedir a causa del coronavirus, sino también por los empleos que han dejado de crearse en el inicio de la temporada turística.

La incógnita está despejada y lo estaba ya antes de que se conociesen los datos oficiales. Se sabía que el paro subiría y la afiliación se hundiría y eso que estos números no recogen a los afectados por los ERTE que, en Burgos y a fecha del 1 de abril, afectaban a 28.292 trabajadores tras los 3.938 expedientes presentados en la provincia.

Las personas afectadas por un ERTE no entran en las estadísticas, lo que aumentaría, y mucho, las cifras de parados. Además, estos malos datos de empleo llegan en un momento en que, si comparamos con años anteriores, estamos acostumbrados a que el paro baje por el comienzo de la temporada turística. Así que hay que esperar datos igualmente negativos en abril cuando se produzca una congelación importante de la contratación.

No solo se trata de quién pierde el empleo, aunque hace días el Gobierno prohibiese de forma temporal los despidos en los que se alegue la crisis sanitaria por el coronavirus como causa, sino también de quién no va a encontrarlo en una periodo en el que otros años sí se encontraba trabajo. Más que unos datos estadísticos, la imagen real de las consecuencias de esta crisis sanitaria en el empleo la arrojarán los datos que se acumularán a partir de ahora.

En cuanto a los contratos firmados en el mes de marzo en la provincia se situaron en 7.686 nuevos contratos, lo que supone una caída del 19,40 por ciento con respecto a febrero y una caída del 22,53 por ciento con respecto a marzo de 2019.